lunes, 21 de mayo de 2012

la marcha del bebe


Cuando el niño ya posee la marcha….desplazarse por todos lados es una experiencia divina. Por ello miraras a un bebe que sale disparado con sus piecitos caminando a diferentes velocidades, no mira obstáculos, no mira lo que hay bajo sus piececitos y mucho menos paredes o puertas que se le crucen por el camino,  solo emprenderá la carrera alocadamente. Así es…y para muchas mamas esta conducta resulta preocupante  efusiva y sin control. No te voy a decir que no te preocupes, seria irracional. Más bien…te voy a decir que requerirás un alto grado de intuición y observación  para vigilar el desplazamiento incesante del bebe, así que: no lo limites, permítele que experimente nuevas sensaciones bajo tu cuidado. Siempre es recomendable que los espacios de casa se encuentren exentos de todo aquello que pueda representar un peligro para el niño. Por supuesto que esto lo podrás realizar en un espacio que ya es rutinario para el bebe como la casa. Y que sucede cuando lo llevas a espacios, abiertos o extraños.... pues sucede que resulta toda una delicia para experimentar y sentir como se desplaza su cuerpo. Así que solo prográmate para mantener y elevar tus niveles de alerta, tu capacidad de intuición y en especial generar mayor observación a todo desplazamiento efusivo de un bebe que  esta descubriendo el significado de la marcha….claro que esta actitud deberá ser equilibrada, no se trata de total rigidez o de una libertad absoluta, se trata de combinar los elementos de la intuición para proteger al niño de posibles riesgos. 
Sera  la actitud que adoptes... quien te dará la oportunidad de gozar y aceptar los riesgos de un nuevo ser que esta descubriendo sus capacidades. Y te digo; no evadas las salidas con el bebe, pues en la medida que familiarices al niño con otros entornos ambos gozaran de los deliciosos desplazamientos  e iras dotándolo de mayor confianza al desplayarse por  terrenos ajenos a sus espacios….enhorabuena

atrapando burbujas

Aunque es muy conocido este tipo de juegos el niño difícilmente se cansa de hacer pompas de jabón. Y te comparto una modalidad mas. Una vez que tienes el frasquito para hacer burbujas inicia el juego (lo puedes elaborar por ti misma, con un poco de jabón en el frasquito y un popote). En un primer momento permite que el niño haga tantas burbujas como desee por si mismo, mirando el efecto que genera el jabón saliendo por el popote. Ahora provee al niño de otro botecito para que atrape las burbujas que hace, persiguiéndolas hasta atraparlas en el recipiente que le has dado previamente. Es decir hacer pompas de jabón y atraparlas. Estarás estimulando el pensamiento del niño, su control motor grueso y fino, sus habilidades sensoriales y por si fuera poco afloran sus emociones al intentar capturar pompas de jabón…saludos

las normas que restringen los sentimientos...


Con demasiada frecuencia algunas normas de la familia únicamente permiten expresar aquellos sentimientos que inconscientemente se han etiquetado como justificados, como saludables, como benéficos para decirse en familia. 
Y lo expreso por las expresiones frecuentes que escucho; “no deberías sentirte de esa manera”, o, “como puedes sentir eso”,”-yo no podría”, “solo diré lo que quiere escuchar mi familia”, etc, etc. Con ello quiero decir que la familia solo escucha lo que las normas de casa permiten decir. Creando normas para etiquetar  y ocultar los sentimientos que generan insatisfacción, remordimiento, desagrado, coraje o miedo...y desde mi punto de vista es limitar el crecimiento interior de los miembros en la familia. Son emociones que llegan a quedarse atrapadas, contenidas, estrujadas o hasta olvidadas supuestamente porque no se deben decir, para no incomodar a la familia. O incluso hasta se llega a pensar; “para vivir felices en casa”….tonterías…. y no lo digo para que te rebeles en tu familia, o, para romper las normas de casa, no. Lo digo porque los sentimientos desagradables en la familia también existen y cuando se tiene la suficiente valía como familia para expresar los sentimientos desagradables, estos salen a borbotones del alma. Así es como se desarrollan nuevas capacidades, nuevas formas de convivir, nuevos estilos de comunicarse generando; el saberse escuchar, el tener la capacidad de entenderse y empatizar con los sentimientos del otro o simplemente saber que en casa se puede sacar toda la basura emocional porque sus paredes son fuertes y sólidas impregnadas de amor y solidaridad. 
Con ello quiero decirte que las normas para contener sentimientos no son validas... pues inhabilitan el alma y el espíritu. Una norma es  válida para crear hábitos, para desarrollar disciplina, para equilibrar las conductas externas de la familia, más no para limitar los sentimientos en un Ser.
Si haces una distinción entre actuar tus sentimientos y decir tus sentimientos, quizá te sea más fácil prescindir de las reglas que limitan la  salida a la realidad de tus emociones.
Cuando insertamos normas a los sentimientos, resulta que los miembros de la familia solo deben hablar de lo bueno, de lo correcto, de lo apropiado o relevante. Entonces la familia vive ocultando sucesos desagradables porque las normas de casa no permiten que se expresen con libertad los sentimientos de la vida diaria, porque no pueden decirse. Estas restricciones son la causa de que algunos niños mientan, otros sientan odio, o simplemente se aíslen de sus padres. Y lo peor de todo es que desarrollan conductas que reflejan su autoestima, traduciéndose en inutilidad, hostilidad o soledad. Por ello ratifico; las normas no se aplican a los sentimientos.
Por otro lado si permites  que los sentimientos afloren... crecerán interiormente. Así que solo  te expreso; desde el momento de nacer el ser humano pasa por una continua experiencia y una extensa gama de sentimientos; miedo, dolor, desamparo, ira, alegría, celos, amor y no porque sean acertados o desacertados, sino por el solo hecho de que existen...ellos no requieren de normas o reglas, a ellos solo hay que permitirles existir.

viernes, 18 de mayo de 2012

amar


viviendo un cuento...

Tan literal es el  pensamiento de un niño de tres anitos o mas, que las analogías que usas cuando le narras un cuento, llegan a conmover al niño (por supuesto que siempre y cuando agregues emoción a la narración) por ejemplo: ….-y entonces al conejito le robaron su guitarrita abuuuuu!!!!, cuando era joven escenificaba este cuento para preescolares y era tan  hermoso que disfrutaba cada instante del cuento…..recuerdos que ahora refrescan mi alma.
Retorno a la sobriedad…. para hablar de las analogías que surgen cuando  narra sun cuento al niño. En pocas palabras sera la representación o efusividad con la que narres el cuento lo que llevara al niño a vivir una experiencia única al vivir el cuento contigo.
Un niño de esta edad tiende a confundirse, pero además es capaz de crear sus propia experiencias, es decir vivencia la trama del cuento que le estas narrando y lo miraras en el niño, cuando muestra  una actitud fresca y sorprendente que sugiere una fantasía poética.
Así que…. cuando el niño  escucha un cuento este puede conmoverlo literalmente, a tal grado que su actividad muscular tiende a hacer referencia al cuento.
 Que hermosa es la representación infantil, así que no dejes pasar esta etapa de la  inocencia   y narra cuantos cuentos desee el niño. 

mi hija pregunta...si yo morire


Eso está muy bien en un niño... Todos los niños están interesados en la muerte; es una de las curiosidades más naturales. Pero en lugar de responderles.... porque toda respuesta que le des  será  falsa...
Por eso nunca respondas; sencillamente, di que no lo sabes, que lo sabrás cuando nos muramos. Y haz que esto se convierta en un entendimiento tácito acerca de todas esas cosas para las que no tie­nes una respuesta.
Cuando un niño pregunta algo que tú no conoces, acepta tu ig­norancia. Los padres creen que aceptar que no sabemos será per­judicial, que nuestras imágenes caerán ante los ojos del niño, pero de hecho es justo lo contrario. Más pronto o más tarde se va a enterar de que sus padres son tan ignorantes y tan impotentes como cual­quier otra persona, que van andando a tientas en la oscuridad como cualquier otro, pero lo disimulan, y ese disimulo es muy des­tructivo. Por eso siempre que hay algo que no conozcas, di: «No lo sé; estoy buscando e indagando.»
Y la muerte es una de esas cosas sobre las que no se puede de­cir nada excepto una cosa: que regresamos a casa, que volvemos al mismo lugar de donde hemos venido. Tampoco lo sabemos. Veni­mos de una fuente desconocida y a ella regresamos. La muerte completa el círculo, pero los dos extremos, el principio y el final, están ocultos en el misterio.
Es como si un pájaro entra en una habitación por una ventana, aletea durante unos segundos y escapa por otra al exterior. Noso­tros sólo sabemos del pájaro cuando está en la habitación. No sa­bemos de dónde viene; no sabemos adónde va. Lo único que cono­cemos es ese pequeño lapso de tiempo, ese intervalo, mientras el pájaro estaba en el interior de la habitación.
Y este es el estado del conjunto de la vida. Vemos nacer un niño; el pájaro ha entrado; de dónde, nadie lo sabe. Y entonces un día la persona fallece, el pájaro ha volado. Y la vida sólo sucede entre el nacimiento y la muerte.... un pequeño tránsito.
Haz consciente al niño del misterio. En vez de darle una res­puesta es mejor hacer consciente al niño del misterio que le rodea, de modo que empiece a sentir más asombro, a tener más capaci­dad de maravillarse.
En vez de darle una respuesta categórica, es preferible crear una búsqueda. Ayúdale a ser más curioso, ayúdale a indagar más. En vez de darle la respuesta, haz que el niño haga más preguntas. Será suficiente si el corazón del niño se hace más indagador; eso es lo único que los padres pueden hacer por el niño. Más tarde, el niño o la niña buscarán sus propias respuestas a su manera. Nos ol­vidamos de que la vida permanece desconocida; algo como una equis. La vivimos y a la vez sigue siendo una desconocida. El hom­bre ha progresado mucho en sus conocimientos, cada día se des­cubren muchas cosas; se siguen añadiendo miles de trabajos de in­vestigación al conocimiento humano, se siguen sumando miles de libros. Pero lo fundamental sigue permaneciendo igual. Ante lo fundamental somos humildes e impotentes.
                                ...de modo que ayúdale a sentir el misterio de la vida.        

jueves, 17 de mayo de 2012

sentir, palpar, estrujar


El cuerpecito de un recién nacidito es como un divino tesoro que la vida  le ha dotado. y evocando esta divinidad….te compartiré una breve ejercicio para las manitas de tu bebe. La finalidad se centra en iniciarlo a sentir, a palpar y en especial a estrujar. Claro…ahora que es la etapa de sus primeros reflejitos miras sus manitas totalmente cerradas y que mejor que realizar estos breves ejercicios que te sugiero a continuación.
 Para ello deja el bebe solo en pañalito y en un ambiente cálido. Ahora sentada frente a el toma uno de sus brazos e inicia a masajear bajando por todo el bracito como presionando  y masajeando alternadamente con la palma de tus manos hasta llegar a sus manecitas. Una vez que tus manos se encuentran con la mano del bebe abre dedito  a dedito suavemente y masajéalo delicadamente, imagina que vas abriendo pétalo a pétalo de  una hermosa flor. A su vez charla con él como fundiéndose piel con piel......en lo más profundo de tu corazón.
Ahora repite la acción con el oto bracito de tu bebe con ello has llevado a tu bebe a SENTIR.
Pasemos ahora a palpar. Coloca en ambas manecitas de tu bebe diferentes texturas….como pedacitos de esponja, pelotitas pequeñas duras o blandas, bolitas de algodón, trocitos de tela, etc. Se trata de que te proveas de diferentes materiales. Una vez que cuentas con las texturas elegidas ahora solo coloca por breves segundos cantidades iguales y  al mismo tiempo en ambas manitas de tu bebe, permitiéndole unos segundos para palpar, mirar  y  sentir. Es importante recomendarte que cuides al bebe para no llevarse  los materiales  a su boquita. Repite esta acción varias veces con ello abras sensibilizado las manitas de tu bebe con diferentes texturas.
Y para cerrar la aportación….que tal que ahora consigues dos grandes pliegos de papel de china de colores llamativos y solo colócalos en las manecitas del bebe….el se encargara de lo siguiente; lo estrujara, lo romperá, lo llevara a diferentes lados para manipularlo, etc. (cuida que no lo lleve a la boca). Cerraras con una deliciosa oportunidad de aprendizaje en tu bebe, pues lo abras llevado a mirar la intensidad del color y además generaste la hermosa movilidad corporal de sus extremidades superiores….felicidades por atreverte a estimular por ti sola a tu bebe.