domingo, 29 de noviembre de 2020

Conceptos Matemáticos

Hacer círculos no solo se pueden realizar en papel, increíble seria hacer círculos al aire, simular su trazado con el dedo sobre un muro, en el piso, girar en círculos todo aquello que implique hacer círculos para concebir líneas o dimensiones genera en niños y niñas fabulosas experiencias respecto a dimensión.

Un concepto abstracto como es “capacidad” es realmente importante enseñarlo, conocerlo, identificarlo y experimentarlo. Experiencia que hace referencia a la cantidad de X contenedor. Basta una lata de mermelada para identificar que contiene, cual es la cantidad, su peso, en que se diferencia de otras latas, a que hacen referencia los números, los símbolos. Numerosos conceptos propicia una lata de mermelada basta querer enseñar a un niño (a) y él se encargará del resto. 

Toda oportunidad que brindes a un niño (a) respecto a saber donde se encuentra es una oportunidad de identidad, ubicación y seguridad. Identidad porque será capaz de movilizarse, protegerse centrarse. Ubicarse le implica moverse, desplazarse y orientarse lo cual le dará seguridad. Cuando le das el referente respecto al país donde vive, el estado, la región, población, cuál es su dirección abres todo un abanico de alternativas para ubicarse en este mundo. 


viernes, 20 de noviembre de 2020

Terrores Nocturnos

Las emociones son el resultado de la facilitación o de la frustración, estado emotivo que se traduce en una actividad del sistema nervioso, glandular y pone en acción todo el sistema muscular. La emoción es tanto mas pura cuanto mas vaga es la intervención de la esfera intelectual. Solo el recién nacido presenta emociones puras, por ejemplo, colera sin objeto. El acto de nacer representa para el niño un trauma (la luz, el aire, el ruido, las maniobras del parto excitan su sistema nervioso). Esta primera noción del mundo tiene más el carácter de emoción que de conocimiento. Las primeras manifestaciones de actividad emocional son el grito, el llanto y el forcejeo más tarde la risa. En cambio, el miedo es una emoción más compleja que el placer (risa) y el dolor (llanto) y se halla ligada al instinto de conservación lo cual es su forma defensiva. Hay dos clases de temor; el causado por ruidos intensos, sacudidas bruscas y el temor producido por el peligro. Cabe afirmar que el miedo en muchos casos se transmite a los niños por contacto y por las personas que viven con él o ella. Una de las fuentes del temor es también la noción de peligro. La mayor parte de los niños se adaptan al ambiente y triunfan a multitud de temores, pero otros conservan durante toda la vida un sentimiento patológico de inseguridad que se manifiesta por timidez cuya raíz se encuentra en el miedo inicial que, al no poder ser socializado y canalizado, es rechazado por la conciencia y se refugia en el subconsciente, dando lugar a manifestaciones de carácter neurótico tales como los terrores nocturnos expresivos de sueños angustiosos. Son la expresión de un estado de ansiedad (inseguridad) de naturaleza neurótica. Los casos mas precoces de terrores nocturnos se han observado durante el primer semestre del segundo año de vida. A partir de aquí aumenta rápidamente la incidencia hasta los dos años o cinco años y medio. Desde este momento empiezan estos terrores a hacerse menos frecuentes alcanzando su mínimo entre los 10 y 15 años. En ocasiones los terrores nocturnos están motivados por un acontecimiento reciente, por ejemplo, el día anterior el niño fue mordido por un perro. Pero generalmente son producto de la actividad del inconsciente que proyecta una endógena vivencia de inseguridad entonces el sueño angustioso, carece de sentido para el que lo tiene y para los demás. Por ejemplo, una niña de 11 años soñó el fin del mundo, otro día soñó al diablo en un carro del que salían llamas. Estos sueños no tenían explicación ni para la niña ni para los familiares. Son terrores endógenos que se explican así; 
En la familia de esa niña la madre sufre de crisis de ansiedad: la hermana mayor padeció graves crisis nerviosas que alivio mediante tratamiento psiquiátrico. El padre abandono el hogar y la madre y la hermana discuten mucho. La pequeña presencia las discusiones las cuales son tan graves que han tenido que intervenir las autoridades. La niña tiene conducta patológica. En la escuela no tiene amigas, no le gusta jugar. Cuando se ve obligada a participar en la clase, piensa que sus compañeras se burlan de ella, se queja de dolores en todo el cuerpo. Es un caso de ansiedad producida por factores ambientales desfavorables. Tal síndrome adopta como manifestación los terrores nocturnos.

viernes, 13 de noviembre de 2020

Movilidad

La movilización del bebe es tan natural, como natural es estimular la totalidad de su cuerpo. Estimular la movilidad en ellos y ellas aporta madurez, habilidad e incluso seguridad. Así se encuentre en su portabebés tanto mirada, como manos y pies son viables para ser estimulados.

Los movimientos son necesarios para el bebe tanto para tonificar sus músculos como para activar su articulación sanguínea. Recuerda que el bebe mejor que nadie sabe lo que quiere. Durante las primeras semanas los movimientos que suceden dentro de la bañera son formidables, así como la fricción que recibe él bebe al secarlo (a) después del baño. Al mes si el tiempo es soleado y la habitación es cálida déjele desnudo unos minutos antes del baño, para que el bebe pueda moverse con toda libertad. Después cuando lo siente en su sillita solo déjelo reposar la frescura de su cuerpo y el relajamiento de sus músculos. Recuerda que al movilizar a tu bebe promueves madurez psicomotora.

En sus juegos, la energía, alegría y libertad propician en todo su cuerpo tensión y movimiento. Dale libertad y no temas porque tu bebe se mueva…pero no olvides la vigilancia.

Cuando el bebe camina, y si lo llevas de paseo, el esfuerzo y la tensión en que pone su cuerpecito lo torna hábil al moverse. Desde el momento de salir o al realizar cualquier esfuerzo al trepar, alcanzar o lanzar un objeto hacen funcionar armónicamente todo su sistema muscular.

sábado, 7 de noviembre de 2020

Yo primero

“ Esta mal….nadie sabe qué mal"
No parece estar dándose esa mejoría.
¿Cuánto acabará? ¿Dónde acabara?
Si es así es ahora, ¿Cómo será cuando cumpla 18 años?
Hemos intentado todo y nada funciona.
El es diferente. ¡Realmente diferente! 
¿Puede transformarse esta situación?
¿Podrá cambiar?
El tiene todo el control. Obtiene las cosas como las desea.
La verdad es que no sufre demasiado. Nosotros, sí.
¿Cambiara?
¿Podrá aprender? No aritmética o a leer… 
No nos referimos a eso, sino a su manera de ser. 
Comprender que hay consecuencias, que hay un mañana.
¡¡Es tan irresponsable!!”

Agresividad

Los problemas de conducta, como la agresividad cuya reacción es la lucha derivada de la falta de satisfacción, la rabia, la protesta, la violencia o el esfuerzo por cambiar las cosas a modo o deseo del niño se debe tratar atendiendo las causas y no las formas. Cuando la familia ha intentado de todo y nada funciona en el niño agresivo, la desesperación en los padres se agudiza y las alternativas escasean. La solución no se encuentra en los intentos o los especialistas se visitan para atender al niño, la solución se encuentra en el conocimiento, el tratamiento y la comprensión que los padres trabajan en familia para solucionar el problema. Si se conoce el origen de la agresividad, se tiene mayor comprensión del problema, se descubre porque y como abordar la agresividad en el niño. Aunque pueden ser muchos los factores desencadenantes de la agresividad los principales suelen ser los siguientes:

La frustración; Es una de las etapas mas largas y frustrantes, no hay día en que el niño no se sienta bloqueado en sus tendencias por satisfacer sus deseos.

Sentimiento de inseguridad; los sentimientos de inseguridad generan comportamientos agresivos. Comportamientos que surgen a partir de las relaciones con la familia, si el niño se siente inseguro en las relaciones con sus padres, es probable que se defienda atacando a los demás y se transforme en un niño inseguro.

La disciplina dura; La disciplina dura, innecesaria e inconsistente contribuye en los generadores de la agresión. La disciplina severa hace que el niño se sienta indeseado, no querido y resentido, si se siente tratado duramente por los padres, cree que el mundo también le es hostil.

La sobredependencia; los padres sobre indulgentes y sobreprotectores intentan dar al niño cualquier cosa que este desea, su sistema educativo toma tanta precaución que impiden que el niño se desarrolle con independencia, de este modo el niño sobrepotegido cree que no puede hacer las cosas sin la ayuda de sus padres.

Entrenamiento inadecuado; un entrenamiento inadecuado puede ser la causa de que el niño desencadene un comportamiento agresivo. Si con frecuencia se le permite que consiga beneficios de tipo físico o social con el comportamiento agresivo, dicho comportamiento persistirá en un futuro como una forma estable y aparecerá siempre que el niño quiera conseguir algún beneficio.

Inconsistencia de los padres; la inconsistencia es frecuentemente un factor desencadenante de la agresividad en el niño, puede expresarse en dos formas; a) cuando uno o ambos padres vacilan ante la conducta agresiva del niño y no saben si alabarla o reprimirla, b) cuando los padres tienen puntos de vista distintos acerca del como hay que educar al hijo.

imitación de los padres; Muchos niños que expresan su desilusión y frustración con diferentes tipos de comportamientos agresivos están imitando a sus padres.

El niño rechazado; El niño que se siente rechazado puede convertirse en un niño agresivo.