martes, 19 de marzo de 2019

Ejercitamiento para Escolares

  1. Da pasos salvando los escalones. Poner una escalera en el suelo y proponerle al niño que camine, dando pasos, sin pisar los escalones. Hacer 1 o 2 veces.
  2. Ve por los escalones. Poner la escalera en el suelo. Tomar al niño de la mano y, sujetándolo, hacerlo pasar por los escalones. Hacer lentamente 1 o 2 veces.
  3. Marcha a gatas. Poner la escalera en el suelo y proponerle al niño que gatee por encima de la escalera, salvando los escalones. Hacerlo lentamente 1 o 2 veces.
  4. A gatas por los escalones. Poner la escalera en el suelo. Desplazarse a gatas, apoyándose con las manos y los pies en los escalones. Hacerlo lentamente 1 vez.
  5. Serpenteo. Pone la escalera sobre el travesaño lateral y sujetarla con las manos. El niño poniéndose a gatas, penetra entre los travesaños de la escalera. Repetir entre 4 y 6 veces.
  6. Pasa por la ventanilla. Colocar verticalmente la escalera y sujetarla con las manos. El niño parado en el suelo, penetra el segundo y tercero escalón de la escalera. Repetir de 3 a 5 veces.
  7. Marcha por la escalera inclinada. Poner un extremo de la escalera apoyado en el respaldar de una silla. Sujetando al niño por el torso, ayudarle a ir a gatas hacia arriba por la escalera. Hacerlo lentamente 1 vez.
  8. Trepar la escalera. Apoyar la escalera contra la pared con cierta inclinación. El niño con ayuda del adulto sube por la escalera y después baja. Hacerlo lentamente 1 o 2  veces.

martes, 12 de marzo de 2019

La risa, la desinhibición, el juego


Porque no convertir el aprendizaje de la lectura, en los más pequeñitos, en un escenario lúdico de risa, desinhibición o juego. La lectura no necesariamente debe ser una actividad álgida o tortuosa de hecho si la enseñas agradablemente te puede sorprender los resultados en niños y niñas respecto a su aprendizaje. Cuando niños y niñas miran una etiquetan, una marca o su nombre ya están leyendo, si ya están leyendo y  si a esa visualización le agregas el acto de leerles lo que dice ahí pues les aportas sonidos, símbolos e imágenes. Imagina que a esta iniciativa le agregas una  dosis teatral, un pequeño teatro hecho en casa con sábanas, carteles de su nombre o fotografías de él o ella  e inventas una historia corta que contenga datos de ellos o bien tomas algunas botellas con distintas marcas, las  formas en la mesa, las lees al niño después las mueves del lugar y preguntas ¿dónde dice?; miel, leche y yogurt observas como la desinhibición al enseñarles el gusto por la lectura es fundamental porque no los estas urgiendo, los estas iniciando en un aprendizaje de naturalidad. Y si de jugar a leer con las letras se trata existen cantidad de juegos como el bingo, la lotería, memorama, rompecabezas, etc. solo es cuestión de alternar tres ambientes que he propuesto para generar en los niños el gusto por leer.

El gusto por leer


Los oídos de niños y niñas siempre están alertas para escuchar sobre todo si les vas a contar historias, versos, canciones, diálogos, aforismos. De hecho existe tanta literatura en el aire que respiran como en los libros que acercas a los niños así que; ¿porque no aprovecharlo? Porque no valerte de recursos que prepares previamente. La intención de animar a los pequeños a leer amplía su lenguaje, escucha palabras nuevas, distingue ritmos entre palabras o contradicciones vez que fácil es iniciarlos en el gusto por la lectura desde antes que se inicien en el aprendizaje del leer y escribir. Solo elige, programa y comparte con ellos historias, versos, canciones, diálogos o aforismo y no se trata de hacer todo al mismo tiempo es cuestión de ir dosificando el aprendizaje. Y aquí te dejo algunos materiales;

Volver a intentarlo


Animar la lectura en los escolares funciona cuando estas dispuesta a propiciar en ellos el “volver a intentarlo” si, se trata de volver a intentar leer aquello que les acerques con el propósito de enseñarles a; resumir, analizar, definir o identificar textos cuatro acciones para desarrollar en niños y niñas la concentración. Lamentablemente es una tarea que tendemos a urgir mas no a enseñarla, es un proceso que precisa de tiempo, desarrollo de nuevas habilidades como la comprensión, la visualización solo por solo citar algunos requisitos del aprendizaje. Desde mi punto de vista sugiero que en el momento que niños y niñas se inicien el proceso de leer y escribir será momento de llevarlos por la ruta del resumir, analizar, definir e identificar textos volviendo a intentar leer lo que han leído. Cuando pides a un niño que vuelva a intentar leer es justo para hacer una serie de preguntas como: de que trata lo que leíste (resumen) es de coches o  trenes, de hadas o princesas (analizar) que significa esta palabra (definir) donde dice (hada) observas la ruta que sigues al volver a leer, y volver a leer cuantas veces el niño lo requiera para encontrar los datos que le estas preguntando es la vía para desarrollar nuevas capacidades. Una forma tan simple fomenta en niños y niñas el gusto por leer y si lo realizas por lo menos dos veces por semana con cualquier libro, revista, periódico o apunte que encuentres por casa pues desarrollas  en ellos el gusto por leer de forma pedagógica.