miércoles, 21 de enero de 2015
El rostro original del niño
El rostro original
del niño es tan valioso que cualquier problema vale la pena. Es tan valioso
que, pagues lo que pagues, sigue siendo barato; no te está costando nada. Y qué
alegría el día que te encuentras a tu hijo con su rostro original intacto, con
la misma belleza que trajo al mundo, la misma inocencia, la misma claridad, la
misma alegría, jovialidad, la misma vitalidad... ¿Qué más puedes pedir?
La ira en los niños
Si el niño te pega, te grita o te lanza objetos, es un niño que ha
descubierto que la valía de mama o papa puede ser vulnerada, así que es hora
de ir por ella, es momento de; rescatarla. Hablo de rescatarte frente a tu hijo o hija. Es la proeza más dignificante que un padre o una madre llega a
realizar y que todo ser humano merece. Vigilar tu autoestima frente a los hijos
no significa desprender ira hacia ellos, mucho menos permitir que la ira que ellos
detonan te toque. Permíteme decirte que rescatarte de la violencia que los niños generan no significa lesionarlos no, de eso no se trata. Se trata
exclusivamente de tu propio rescate, sin emplear la violencia hacia ninguna de
las partes, hacia los hijos o hacia ti.
El cómo hacerlo será una enorme hazaña que solo a ti te compete. Estoy convencida que cuando generamos
conductas que fortalecen la relación con los hijos o hijas uno se siente muy a
gusto y si la ira estalla de pronto, ellos saben qué hacer con su propia ira, pero
no la canalizan hacia los padres. Si tus hijos te observan cómo te respetas y los respetas, ellos sabrán perfectamente que hacer con su ira. Así que salvarte de la
violencia que generan hijos solo te compete a ti, mirarte como la
victima solo agravara la situación; por un lado crea en los chicos
sentimientos de culpabilidad o bien corres el riesgo de que su ira se
intensifique, ambas son conductas que los lleva a sentir minusvalía. Salvarte por
ti misma es la solución y el cómo hacerlo te exigirá de valía y valentía.
Valía para descubrir que te perteneces y requieres ir por ella para mostrar a
los hijos como se hace para respetarte. Valentía para enfrentar la situación
con entereza, sin darle rodeos a la situación o encubrir la violencia, mucho menos quedarte en la inercia. Como también puede llegar a suceder que uno disculpa a los hijos porque son pequeños o
porque no saben lo que hacen. Requerirás de una potente valentía para
tomar tu corazón fuertemente y
rescatarlo de la violencia y el cómo hacerlo solo tú lo sabrás. Cuando lo logras, comulgas con el respeto y el amor hacia ti y hacia tus hijos.
miércoles, 14 de enero de 2015
La hazaña de leer y escribir
A que padre o madre no le interesa que su hijo o hija sepa leer y escribir,
de hecho considero que posterior al aprender a hablar, uno de los principales intereses
de toda madre o padre se centra en; que
el niño aprenda a leer y escribir. Sera
el tema que compartire y me enfocare en dos momentos básicos de este proceso; la edad ideal para iniciar al niño y el cómo
enseñarle a leer y escribir.
La edad ideal…
Imagina que no sabes leer, ni escribir y de pronto te encuentras frente a códigos o símbolos desconocidos o quizá alguien te pregunta;
que dice ahí? o te piden que escribas tu nombre y no sabes ni leer, ni escribir.
Te aseguro que en esos instantes tu cerebro, o bien se bloquea, o bien se queda
paralizado pues no sabes que responder, mucho menos escribir. Pues algo similar
sucede con un niño cuando de adquirir conciencia de códigos y símbolos se
trata. Con ello quiero
ejemplificar como sucede el aprendizaje de leer y escribir en el niño quien parte
únicamente de sus propios esquemas de pensamiento. Será un aprendizaje rápido
y fácil si el niño cuenta con esquemas de pensamiento acordes a su edad o bien
lento y difícil si el pequeñito carece de ellos. Bajo este preámbulo es
importante establecer la edad para iniciar al niño a leer y escribir y ello depende
de quien lo inicie. Bien puede ser en el hogar o bien el sistema escolar donde asiste al niño lo determina. Desde mi punto de vista considero que iniciar al niño a temprana edad en este
aprendizaje es ideal. Algunos padres preocupados por la educación de sus hijos
los inician a temprana edad, otros esperan a que el niño entre a la escuela o aún
más grave, existen padres que se percatan demasiado tarde que sus hijos no saben
leer y escribir. Me he encontrado con
casos donde el niño se inicia a leer a partir del año de edad, pero también casos
donde el niño se inicia a los once años y en ambas situaciones la edad influye decisivamente pues no es lo mismo enseñar a un bebe de un año quien gozara los
descubrimientos de las letras, que para un niño de once años que se enfrentara
a la premura y ansiedad del adulto urgiendolo para que aprenda a leer y
escribir. Cuando enseñe a bebes a leer y escribir a los escasos ocho
meses recuerdo perfectamente cuando le ponía al bebecito su nombre en un cartel;
Ivo y su reacción era de alegría al
mirar en el cartel su nombre, balbuceando de inmediato me decia Ivo, Ivo, una y
otra vez. Experiencia que constituyo una investigación como Psicóloga y el aval
del porque opino que; cuando un bebe se inicia a temprana edad en este proceso, goza de sus propios descubrimientos y aunque
su escritura sean simples garabatos, el niño ya se inicia a tomar conciencia de códigos y símbolos.
Como enseñar a leer y escribir...
Ahora pasemos al cómo enseñar a leer y escribir al niño. Deberás partir de
algo familiar como su nombre y asegúrate que sea el nombre de pila, es decir
si se llama; Francisco inicia el proceso con su nombre como tal para no confundir
al niño con otros apelativos como Paco, Paquito, Bebito.
Cuando lo inicies tanto en el acto de leer como de escribir deberás emplear
un solo tipo de letra no mezcles varios tipos para no confundirlo,
posteriormente se ira apropiando del resto.
Si el niño ya conoce su nombre e inicia a escribirlo, ahora llévalo a conocer
el mundo de símbolos que competen a la lectura y escritura y no necesariamente
se trata de que le enseñes el alfabeto. En primera instancia llévalo a familiarizarse
con todo tipo de códigos para que diseñe sus propias hipótesis del aprendizaje.
Y si observas que el niño por si solo pregunta, lee hace, intentos de escritura llévalo a familiarizarse con el alfabeto será momento de cerrar el círculo
de comprensión del acto tanto de leer, como de escribir. Y para finalizar sugiero que mires
los niveles que te dejo abajo, te dará un referente para no forzar u obligar al niño en este aprendizaje. Deberá ser un proceso gradual y de descubrimientos para no crear en el
niño una tortura cognitiva.
Etapas por las que atraviesa el niño para llegar a leer y escribir
PRIMER NIVEL
- Cuando el niño se inicia a escribir, sus trazos son grafismos primitivos y solo alcanza diferenciar imagen de texto.
- Se empiezan a evidenciar dos hipótesis de base sobre las cuales trabaja el niño: las grafías son variadas y la cantidad de grafías es constante.
SEGUNDO NIVEL
- El pensamiento del niño establece que para escribir se requiere de cantidad y variedad de símbolos para que se pueda leer.
- Las formas de las grafías son más definidas, más próximas a las letras convencionales.
TERCER NIVEL
- El niño construye la hipótesis silábica, es decir, cada letra vale por una sílaba. Con esta hipótesis el niño da un salto cualitativo con respecto a los niveles precedentes.
- En este nivel, así como en los anteriores, existen conflictos cognitivos que el niño resuelve medianamente. Por un lado, las formas fijas, provistas por estimulación externa y aprendidas como tales, con una correspondencia global entre el nombre y la escritura; por el otro lado, una hipótesis construida por el niño al intentar pasar de la correspondencia global a la correspondencia término a término, y que le lleva a atribuir valor silábico a cada letra.
- Al trabajar con la hipótesis silábica, los niños están obligados a escribir solamente dos grafías para las palabras bisílabas (lo cual, en muchos casos, está por debajo de la cantidad mínima que les parece necesaria y el problema es aún más grave cuando se trata de sustantivos monosílabos (poco frecuentes en español, como “sol” y “sal” constituyen consabidos ejemplos de las palabras iniciales en el proceso de enseñanza-aprendizaje tradicional).
CUARTO NIVEL
- Se presenta una transición entre la hipótesis silábica y alfabética, es decir el niño esta procesando en su pensamiento que las silabas forman palabras y estas tienen sonidos.
QUINTO NIVEL
- El niño lee y escribe aunque aun esta afinando códigos y formas correctas de la escritura.
miércoles, 7 de enero de 2015
Juguetes para niños de 4 años en adelante
Los juguetes para niños o niñas de cuatro años en adelante tienen un
tremendo impacto en su aprendizaje. Sean juguetes tecnológicos, manuales,
didácticos o al aire libre. A esta edad el pensamiento del niño se encuentra en
pleno desarrollo y todo aquello que pongas a su alcance pondrá a prueba mente y emociones, te explicare como sucede esto. A esta edad, jugar para el niño
es un verdadero placer, el juego es su prioridad, pero también descubre que se
le resta tiempo al juego pues mama o papa ahora lo involucran en sus primeras
responsabilidades como las tareas, el aseo personal de sus pertenencias, su
mascota, etc. el niño deberá lidiar con sus emociones, pues por un lado deberá
cumplir con sus tareas y por otro controlar el deseo de jugar. Si te
percata de estas necesidades intrínsecas del niño, por un lado cognitiva porque
un juguete le va a brindar estímulos de aprendizaje y por otro lado emocional
porque deberá ser capaz de autocontrolarse podrás contribuir
con él o ella a equilibrar el estado por el que atraviesa sin caer en los extremos. Es decir no ser muy
permisible o muy exigente cuando de jugar se trate. Cuando el niño se percata
que eres coherente con él, aprende a autocontrolar sus propias necesidades
internas.
Juguetes para niños de 2 y 3 años
El efecto que tienen los juguetes en niños entre dos y tres años es definitivamente importante pues los preparan para el juego. En el momento que pones en las manos de un niño un juguete a esta edad, empieza a adentrarse en la imaginación. Y si el juguete se presta para las representaciones como los muñecos o muñecas el niño los empleara para iniciarse en el juego simbólico. Es decir el pequeñito inicia a crear sus primeras fantasías o dicho en otras palabras; el niño da vida a sus muñecos.
A esta edad los juguetes también preparan al niño en sus primeros roles. Cuando pones al
alcance del niño o niña bolsitas o cochecitos estas dándole alternativas para
imitar roles. La nena imitara a mama jugando a ser mama o se pintara como mama
los labios. El niño imitara a papa manejando en su coche. Los roles que se
desempeñan en casa, el niño tiende a imitarlos a través de los juguetes y lo
relevante de ello son las representaciones mentales que hace el niño mediante el juego. A través del juego te puedes percatar que tan
saludables son los roles en casa al mirarlos representarse con los juguetes que das a un niño o niña.
Todo juguete que invite al niño a desplazarse al exterior es una oportunidad para estimular su cuerpo. Sean montables, brincolines, cuerdas,
resbaladillas, areneros, chapoteaderos, etc. Los juguetes que invitan a
movilizar el cuerpo del niño resultan ser un recurso para la
psicomotricidad tanto gruesa como fina, y no solo es un aprendizaje psicomotor,
también estimula el pensamiento del niño a través de la atención, percepción,
equilibrio y ubicación en el espacio. Un juguete no solo entretiene a los
niños, un juguete bien elegido potencia sus capacidades mentales y corporales del niño.
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