miércoles, 5 de noviembre de 2014
Rompe el circulo de los "NO" de un niño
Cuando el niño no quiere comer, no quiere dormir, no quiere subirse al
coche, no quiere levantar sus juguetes, no quiere, no quiere ambos quedan atrapados en un círculo enfermizo de “no
quiere”, tu pides algo y él no quiere. ¿Porque se crea tan nocivo circulo?
porque no te has dado cuenta que estas atrapada con el niño en conductas
viscerales que los encierran en un círculo nocivo. Ambos se conocen y saben cómo
se comportan, pides algo al niño y sabes que te dirá no, te evadirá o te
ignorara y viceversa, el niño te conoce a tal grado que va
desarrollando nuevas formas para evadirte. Para salirse de tan nocivo círculo
lo único que funciona es salirte de él, es romperlo. Salir del círculo que
enferma a ambos requiere de intangibles que solo el adulto puede comprometerse
con ellos; entereza, perseverancia y toma de conciencia. Factores que definitivamente
no se los puedes pedir a un niño. Retos
que te competen solo a ti si deseas erradicar tan negativas conductas que desgastan
a ambos.
Entereza para no ceder en el momento de dar indicaciones o pedir tareas al
niño. Sumado a ello deberás desplegar múltiples estrategias para lograr la
respuesta sin claudicar y por supuesto sin invitar a la violencia para que
reaccione el niño.
Perseverancia para romper el círculo enfermizo. La clave del éxito reside
en ser perseverante, si lo haces un día y al día siguiente la voluntad flaquea
y la entereza brillo por su ausencia, entonces no funciona. Perseverar va a
doler, te va a desgastar pero solo entonces estarás haciendo algo real por
romper círculos enfermizos.
Toma de conciencia. Tomar conciencia de que algo no funciona en la relación
con el niño es como la luz que te guiara para saber qué haces bien y que estás
haciendo mal al guiar la conducta del niño. Tu conciencia te dirá la verdad
del porque el niño reacciona con sus clásicos no. Es la sabiduría que te dirá como
guiar a un hijo o hija.
Te he compartido tres intangibles para romper círculos enfermizos, de
nosotros los padres depende formar hijos emocionalmente saludables.
martes, 28 de octubre de 2014
Incongruencias de los padres
Una de las
incongruencias mas acentuadas que cometemos como padres se presentan a la hora
de la comida, pues sin desearlo enseñamos al niño a ser falso, mentir o ser
iracundo, te diré como surge. Cuando le dices a tu hijo que lo amas,
despliegas hacia él o ella dulzura, ternura, cariñitos, etc. y llegado el
momento de comer te transformas en una madre o un padre exigente, iracundo o
agresivo para obligarlo a comer, creamos de inmediato una fractura en la relación,
una desestabilidad emocional pues el niño no sabrá porque
te enojas, si él no quiere comer, no sabe como reaccionar ante tu ira
por lo que genera conductas para defenderse de ti, decirte que
si, pero no comerá, tratar de agradarte, etc. en pocas palabras le
estas creando una doble personalidad, lo estas confundiendo emocionalmente y tu
deseo porque tu hijo se alimente quedara obsoleto. Alimentarse bajo tempestades
emocionales, no es alimentarse, es fracturar un sano desarrollo emocional en el
niño.
!Mastica bien la comida!
Comer es una situación que demanda al niño desarrollar múltiples
aprendizajes y habilidades desde el momento de nacer. Al principio alimentarse
para el niño solo es cuestión de succionar la leche de mama o la mamila, pero
llegado el momento de comer alimentos sólidos nuevas habilidades deberá
desarrollar y una de ellas será el “masticar”.
Antes del año se iniciara a descubrir cómo se mastica, ¿que es masticar? Y masticar
para un niño es todo un aprendizaje que le demandara tiempo, comprensión y
habilidad para mover adecuadamente los órganos de la boca hasta dejar los
alimentos correctamente triturados para tragarlos como se lo pide mama. ¿Observas? como el acto de masticar a un pequeño le demanda adquirir habilidades y aprendizajes.
La sola palabra masticar ya le implica nuevos aprendizajes pues deberá comprenderla y responder a ella. Cuando le dices al niño; ¡mastica bien la comida!, le hablas en un idioma que no entiende, no
te entiende, sin embargo la naturaleza humana es tan maravillosa que el pequeñito por
pura imitación te empieza mirar como llevas la comida a la boca, mueves lo
labios y el maxilar, así es como el bebe intuye que estas moliendo con los dientes
percatándose de lo que le pides. Enseñar al niño a masticar la comida requiere de patrones de imitación, si no le muestras como hacerlo no le pidas que mastique bien pues no sabe cómo
hacerlo, mejor enséñale como se hace. La mejor manera de enseñarle al niño a masticar la comida es llevarte a la boca un bocado, dejar que te mire como abres la boca, introduces el bocado, inicias a masticar e ingieres el bocado pasado un tiempo. Cuando hayas realizado varias
veces este acto de masticar con tu pequeño y el sepa como hacerlo ahora si pídele que ¡mastique
bien la comida!.
martes, 21 de octubre de 2014
Si le pegan al niño en la escuela
Si
le pegan al niño en la escuela, él debe aprender a defenderse, expresión que escucho de quien está involucrado en el desarrollo
de un niño o niña, sean los abuelos, los tíos o amigos cercanos. El niño debe aprender a defenderse por sí mismo, argumentos que buscan solidarizarse con el
padre o la madre del niño o niña, argumentos que solo son paliativos pasajeros que en nada
contribuyen con los padres del niño y el niño mismo, lo real es que el niño ha
sido violentado. Como padres deseamos tener alternativas para ayudar al pequeño ya sea que apliques los consejos que te da la familia, acudas a un especialista
para recibir orientación o actúes según tu intuición. El porque le pegan a un niño en la escuela tiene varios orígenes, sea que la escuela no cuenta con los
controles adecuados para regir la disciplina de sus alumnos, sus reglas son altamente
permisibles, sus grupos son numerosos y se presta para el descontrol y la
violencia o quizá el adulto al frente del grupo ha perdido el control de
aquellos niños que son violentos. Por el lado del hogar bien puede ser que el niño o niña sea hijo (a) único y no han vivido este tipo de violencias, quizá se relacione únicamente
con adultos y no ha convivido con niños de su edad o tal vez es un niño tímido
e inhibido de baja autoestima y permite que otros le hagan lo que deseen, estos
son algunos de los referentes del porque le pegan a un niño en la escuela, pero
la situación no se centra en el origen se centra en el que hacer y para ello te
propongo las siguientes líneas de actuación:
- Cuando un niño ha sido violentado y te señala la mordida, el golpe en la cara o la cabeza, toca suavemente la violencia que recibió el peque, solidarízate con él, abrázalo, consuélalo y jamás cometas el error de regañarlo o decir que se ponga abusado, que se defienda, mucho menos estalles en ira frente a el, si lo haces el niño se culpara y pensara que estuvo mal y cuando le vuelvan a pegar ya no te dirá nada.
- Al enterarte de que le pegaron a tu hijo o hija toma las medidas correspondientes a la brevedad, no dejes pasar el tiempo.
- Informa de inmediato a la autoridad de la escuela y pide su intervención directa.
- Indaga que niño pego a tu hijo o hija, no para tenerlo en la mira, no, para protegerlo de él o ella.
- Si la violencia ha sido grave comunícalo a las autoridades externas que tengan injerencia con la violencia infantil.
- Revisa diariamente el estado anímico del niño al salir de la escuela, al bañarlo observa cómo reacciona al tocar su piel, busca si hay lesiones en su cuerpo, vigila su sueño, si es tranquilo o tiene pesadillas, si rechaza la escuela, indaga si juega con otros niños, pregunta a la maestra como estuvo en clase, etc.
- Solicita a la maestra del grupo; que siente a tu peque alejado del niño que pega, pero si tú hijo o hija busca al niño que le pega no lo reprimas, mucho menos le digas que no se lleve con ese niño, mejor dile que se retire de el y si le vuelve a pegar que avise al adulto del grupo.
- Asegúrate de seguir tu solicitud a la autoridad de la escuela y pregunta a la maestra cómo va el caso del niño que pega.
- Mantente alerta de la conducta de tu hijo y si observas que el niño aprendió a pegar abórdalo sutilmente indicándole que no se debe pegar.
- Y si a tu hijo le vuelven a pegar, será necesario que tomes medidas más drásticas, ya sea que lo cambies de grupo o de escuela pues es más valioso vigilar la seguridad y salud emocional del niño o niña a seguir en la comodidad de lo conocido.
Cuando le pegan a un niño o niña en la escuela es vital actuar inteligentemente tanto con las
autoridades correspondientes como con tu hijo disminuirás tu ansiedad y no cometerás
errores de más de lo mismo como el clásico; -tú
también pégale-
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