martes, 7 de mayo de 2013

El aprendizaje


A palmear


Teniendo al bebe recostado o sentadito en su silla, toma ambas manitas y palmea al mismo tiempo al ritmo de alguna música. Asegúrate de palmear las manitas del bebe: arriba, abajo, a un lado, al otro, sus manos contra tu manos, etc. Lo importante es realizar con las manos de tu bebe y las tuyas tantos movimientos como surjan en el instante.

Arriba - abajo

Recuesta al bebe boca abajo de preferencia solo con su pañalito. Ahora coloca una de tus manos por debajo de su estomaguito, se muy cuidadosa con su piel, ahora levántalo suavemente, y bájalo de la misma manera, es decir que tu brazo eleve el estomago del bebe y lo baje suavemente. Continúa elevando la altura gradualmente. Realiza el ejercicio varias veces y al concluir permite  descansar al niño. Te sugiero que al realizar la estimulación del tronco de tu bebe no uses anillos o pulseras que pudiesen lesionar al niño.

lunes, 6 de mayo de 2013

La crisis de los tres años


Para el adulto un periodo muy importante en el desarrollo del niño es la crisis de los tres años, el cual se caracteriza como una fase dominada por la obstinación, por la necedad de los niños de hacer solo lo que ellos quieren. En esta etapa, que normalmente es de corta duración, el niño experimenta profundos cambios tanto de ánimo como de capacidad intelectual. Es difícil manejar a los niños durante estos periodos de crisis, debido a que están afectados por profundos conflictos externos e internos.
No pueden aceptar las normas más elementales de la convivencia social, pero al mismo tiempo son obstinados, en muchas ocasiones no saben en verdad que es lo que verdaderamente quieren. Se obstinan en algo que, si se les da de inmediato, como a veces lo hacen los padres con tal de que el niño no de lata, el niño, que en verdad espera una negativa o un regaño; se muestra confundido.
Que aparezca una crisis de esta naturaleza en un niño no es algo raro. Lo que ocurre dentro de él es una verdadera revolución debido a que aparecen nuevos intereses y nuevas necesidades, lo cual conduce al establecimiento de nuevos y mejores mecanismos de funcionamiento mental. En otras palabras podría decirse que: “el niño pierde lo conseguido, antes de que aparezca algo nuevo”

La vida interior de un adolescente


El fin de la niñez abre paso esporádico a la pubertad, pubertad  que abra de sumergirse en la adolescencia. Transición que surge  entre los diez y diecisiete años surgiendo entonces; la palabra. Si, hablo de la palabra, la palabra como instrumento. La palabra de la que ahora se apropia el niño para sumergirse en sus profundidades. Un niño que se ha convertido en un adolescente y ahora tiene frente a él la fuente de las emociones para tomar conciencia de ellas o bien para autodestruirlas, si no sabe canalizarlas adecuadamente. Y porque hablo tan drásticamente de una autodestrucción.  Porque el adolescente se inicia en el mundo de los adultos. Adultos que le exigirán vivir en el mundo del respeto, la responsabilidad y hasta del éxito para cuando sea  adulto. Requerimientos demandados regularmente mediante la palabra, vista como comunicación por el adulto que cree comunicarse con su hijo, pues solo hace referencia al deber, no a las profundidades de una vida adolescente.
La palabra proveniente de él o del adulto toca medularmente las profundidades de su vida interior. Quizá hasta llegue el momento en que no se percate que sus labios se mueven, solo habla para sí mismo, solo habla para calmar las emociones que ahora le invaden. El adolescente ha encontrado una manera secreta para hablarse a sí mismo, para contactar con su vida interior. Sus deseos, alegrías, incertidumbres, actuaciones y hasta sus miedos, ahora solo se  habla en sus adentros.
Una nueva conciencia se ha despertado, una vida interior está tomando forma. Y este nuevo camino traerá consigo infinidad de circunstancias que movilizaran por si solas la fuente de emociones que habitan a todo adolescente. Para algunas hallara respuesta, encontrara a sus iguales con quien satisfacerlas o a la familia donde se refugiara. Pero habrá aquellas  para los que no encuentre respuesta. En especial aquellas que le afectan de manera directa como; la separación de los padres, los conflictos entre hermanos, la falta de equidad ya sea escolar o de grupos o el rendimiento escolar.
Surge un adolescente que se guarda o comparte para su vida interior infinidad de fabulaciones o secretos, los cuales tienden a ser reprimidos o manifestados mediante su autoestima. Algunas veces la miraras salir abruptamente en forma de ira, coraje o violencia cuando no halle las respuestas adecuadas de lo que sucede en su vida interior o bien adoptara una conducta de adultismo mental enfrentando al adulto.
Estas reacciones lejos de desaparecer  solo violentan más su vida interior así que; la vida interior de un adolescente se tornara más saludable en tanto viva plenamente la conciencia de las emociones y se dote al joven de los medios adecuados para ayudarle a entender su vida interior.

Nacer

Nace un bebe y él o ella serán lo esencial, lo más puro.  El pensamiento aparecerá a continuación; el niño acumulará conocimiento y escribirá muchas cosas en la página de su vida.  Y se convertirá en un conocedor –de esto y lo otro- y se imaginara ser médico, ingeniero, astronauta...en fin. Sin embargo en el momento en que nació era simplemente pura consciencia, frescura, una página en blanco, sin nada escrito, ni siquiera contaba con su propia firma, un manantial sagrado. Eso es la inocencia primigenia, eso es lo esencial, esa es la inocencia perdida.