viernes, 6 de diciembre de 2019
miércoles, 4 de diciembre de 2019
Lenguaje y pensamiento en los maternales
Lenguaje y pensamiento nacen juntos
dice Piaget, es la capacidad mental del niño la que empuja el desarrollo
lingüístico a niveles más altos. Así el lenguaje es un instrumento al servicio
del pensamiento.
Si tan solo nos detuviéramos a
reflexionar sobre este tipo de teorías en niños y niñas encontraríamos el cómo
guiarlos respecto al desarrollo de su lenguaje. Y si ese tan solo se tradujera
en acciones como encauzar adecuadamente el lenguaje del niño (a) minimizando conductas
que inhiben su lenguaje como el forzarlos a hablar, repetirles hasta el
cansancio como deben expresarse, regañarlos por hablar mal e incluso
menospreciar o reírse por su forma de hablar estarías gestando en ellos un
lenguaje amplio y confiado. Solo analiza la teoría; es una capacidad que está
ahí, en tu hijo (a) solo estimula acercándoles múltiples posibilidades para
que desarrollen fuerza en su lenguaje, experimenten cantidad de alternativas para
comprender, entonces estarás contribuyendo con su lenguaje.
Lenguaje y pensamiento en los preescolares
El lenguaje, una vez formado, va a
servir para el desarrollo cognoscitivo de niños y niñas. El niño manipula
diversas clases de objetos físicos, hace y deshace colecciones de cosas para después
ser capaz de extraer conceptos abstractos que las definen a nivel verbal,
pudiendo comprender y usar expresiones como mayor que, menor que, igual que o
clasificar las cosas en categorías como animales, frutas, juguetes, artículos, etcétera.
Para cuando son preescolares la
teoría acerca del desarrollo infantil llega a leerse muy distante por lo que restamos
importancia para ser observada en niños y niñas pero si te detienes a reflexionar
en ella descubrirías el medio a través del cual se valen los niños para desarrollar
lenguaje y pensamiento. Cuando el lenguaje sea lo más urgente a estimular en tu
hijo (a) solo válete de su pensamiento, aprovecha el cumulo de capacidades que están
desarrollando propiciando acciones propias de su desarrollo como; que te parece
mi vestido largo o me pongo el corto, te gusta tu bufanda larga o te la compro más
corta, ¿quién comió más helado y a quien le toco poco? ¿qué trozo de queso es
mayor y cual es menor? ¿Cuántos trozos de pizza te comiste? -ordena tus
juguetes- Las instrucciones que das a los niños día a día están cargadas de
posibilidades para fortalecer su inteligencia y obvio que este tipo de acciones
desencadena la estructuración del lenguaje y no te vez envuelto (a) en
conductas que inhiben el lenguaje de un preescolar.
Lenguaje y pensamiento en los escolares
El lenguaje, entonces es el
instrumento que regula la percepción y el conocimiento del mundo externo e
interno en el que vivimos permanentemente. Los conocimientos que adquirimos
dependen en gran parte de los instrumentos verbales que poseemos. Los
conocimientos se transmiten a través de la información verbal pero las
operaciones y conceptos que absorben la información y la encajan en una
estructura significativa no se originan en el lenguaje. El desarrollo
intelectual es posible sin el lenguaje, pero el lenguaje no es posible sin
pensamiento, su adquisición está ligada a la elaboración de estructuras
cognoscitivas en general.
Suele suceder que cuando niños y
niñas se encuentran en la etapa escolar, entre 6 y 12 años, olvidamos continuar
favoreciendo el progreso de su lenguaje, si te detienes a analizar la teoría que
expongo previamente de Piaget respecto al lenguaje, observaras que este se
convierte en el instrumento de las capacidades intelectuales de los niños. Los escolares
entran a la lógica del pensamiento y deberán valerse en gran medida de su
lenguaje para ampliar sus conocimientos ahora no se trata de estimularlos o
animarlos a estudiar para que aprendan, la tarea reside en abrirles el bagaje
de comunicación. La comunicación juega un papel decisivo en ellos cuando de favorecer
el lenguaje se trata y no solo es hablar por hablar, se trata de llevar a niños
y niñas a experimentar distintas formas de hablar, de escucharse, sentir lo que
dicen, percibir como hablan otros, apropiarse de la adecuada estructuración de
palabras e incluso ser capaces de poseer un amplio vocabulario situación que logras llevándolos a
experimentar su lenguaje con sus iguales, con adolescentes, jóvenes, adultos o
adultos mayores. Solo es cuestión de abrir el abanico de posibilidades entonces;
el niño escuchara, intercambiara y favorecerá su lenguaje.
viernes, 29 de noviembre de 2019
miércoles, 27 de noviembre de 2019
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