lunes, 11 de agosto de 2014

Fortalezas de un preescolar

El juego en la edad preescolar entre 3 y 6 años es  la base para fortalecer su primeros esquemas de pensamiento. Si le permites clasificar, ordenar, amasar, saltar, brincar, armar, leer cuentos, construir torres, jugar con arena, etc, le estaras permitiendo expandir su inteligencia.


El lenguaje de un preescolar desempeña un papel determinante en el aprendizaje, la capacidad de discernimiento, el razonamiento lógico y la iniciación de sus primeros patrones de conducta. 

Durante la edad preescolar se definen las primeras estructuras que serán los peldaños del pensamiento transductivo y el pensamiento sincretico.  Por ello resultara vital estimular sus primeras experiencias ludicas.

El preescolar

Todas las experiencias que vive un niño desde su nacimiento hasta  la edad escolar  constituyen su educación. El lenguaje que oye, las personas que le rodean le sirven de modelo para sus comportamientos, aquellas que le muestran el camino de las normas o lo limites, los libros, los medios de comunicación, las salidas en familia, todo absolutamente, todo lo que rodea al niño son sus maestros, es su escuela. La vida del niño es como su plan de estudios, la adaptación es su principal objetivo, el desarrollo se convierte en el proceso docente y el niño es el alumno ubicado en el centro del proceso.
La característica más sorprendente del medio ambiente del niño en edad preescolar es su naturaleza fortuita, no estructurada. Es decir el grandioso despliegue de aprendizaje que se va sucediendo en la medida que crece. Sus progresos desde el nacimiento hasta la edad escolar son fenomenales. Por ello parece razonable pensar, que si es tanto lo que el niño aprende durante sus primeras etapas teniendo como maestros a sus padres, su familia, cierto es que esta primera educación se multiplicara en la media que los padres vayan abriendo nuevas brecas de experiencias.
Dos entidades perfectamente identificadas por una lado la familia y por otro la escuela. Si somos capaces como padres de incrementar y formalizar la educación que damos al niño en casa, su potencial tendera a expandirse y llegado el momento de la escuela, tu pequeño estará ávido de nuevos aprendizajes.


viernes, 8 de agosto de 2014

Gatea

Antes de cumplir el año el niño ya gatea con gran presteza, puede hacerlo sobre manos y rodillas. Pero incluso pese a su pericia en el gateo no puede resistir el impulso de levantarse sobre sus pies  y cuando logra pararse por su mismo esta listo para dar sus primeros pasos, aunque aun no logra total equilibrio hasta cuatro semanas después. Así que se contenta con desplazarse  de costado, agarrándose a algún sostén, camina si, pero aun con apoyo.


Habilidades desbordándose

Por ahora el pequeñito es un ávido explorador, garabatea espontáneamente, habla en jeringonza, se expresa con ademanes, utiliza la cuchara y se pone accesorios sencillos como el gorro, se quita el zapato, un calcetín. El año es una etapa de  infinidad de habilidades desbordándose una etapa totalmente naciente.

El primer año

Desde el punto de vista del desarrollo del niño, el primer cumpleaños representa, más que una etapa de culminante, una etapa intermedia. El niño, al año todavía debe perfeccionar infinidad de patrones de crecimiento, desarrollo y adaptación a su entorno.


lunes, 4 de agosto de 2014

Cultiva la inteligencia

Si hoy cultivas sabiamente la inteligencia de tu hijo, mañana observaras que eres tan inteligente como tu hijo. 

Conductas infantiles

Toda conducta infantil no es una reacción meramente arbitraria por parte de un niño. Son respuestas a infinidad de factores sean externos, internos o simbióticos. Es decir el organismo demanda al niño responder de acuerdo a lo que está viviendo. No es casualidad que un niño responda con agresión si vive entre la hostilidad. Ni es de sorprenderse que el niño responda cariñosamente si desde el momento de nacer ha convivido con el amor. Como tampoco es de alarmarse que el niño sea temeroso, si solo se ha alimentado del miedo sembrado por el adulto.  Una conducta infantil no se origina porque el niño tenga buena o mala sangre, no. Una conducta infantil solo es el reflejo de su alimentación emocional.