miércoles, 18 de julio de 2018

Ocio para maternales


Cuando los maternales viven una experiencia diferente con los alimentos que van a consumir se torna un ambiente estimulante, apetitoso y hasta creativo. Actualmente puedes encontrar por la red cantidad de sugerencias para presentar los alimentos a tu hijo (a) pero  independientemente de lo que elijas, lo valioso es que no solo te rijas por lo que encuentras para presentar la alimentación a tu bebe, también propicia que ellos participen  con su imaginación, sugerencias o elaboración de lo que quieran comer. Sea que preparan un pepino para comerlo en forma de tren simulando los vagones con rodajas y uniéndolos con trozos de zanahoria o bien corta rodajas ovaladas de jícama para hacerles  globos dispuestos en una charola esparciéndoles chispas o polvitos de dulce que se puedan consumir pueden hacer hombrecitos con unos trozos de queso... lo realmente valioso es que despiertes en los niños su imaginación además de alimentarlos.

Sentarte con los niños a decorar globos es fabuloso para entretener, desarrollar habilidades y por supuesto convivir con ellos.
Derramar pintura sobre rostros con distintas expresiones: contenta, enojado o triste son ideales para estimular a los pequeños tanto su atención como su habilidad motriz.
Los maternales aman dormir con algo que les de seguridad y que mejor que seas tu quien decore sus propios cojines.


Preescolar

Ir al preescolar no es para restarle importancia en materia de aprendizaje, de hecho si hoy pones especial atención en crear en niños y niñas escenarios de aprendizaje acertados estarás favoreciendo los principales esquemas de pensamiento, mismos que serán el soporte de aprendizajes mas complejos... así que presta atención a lo que hay que propiciar en ellos:

Los números... desde los tres años la noción de numero ya es un requisito de aprendizaje así que aprovecha toda oportunidad para familiarizar a niños y niñas con ellos.
Las letras...asegúrate  que no lleguen a la escuela sin leer y escribir, inicia desde ahora  y si inicias con su nombre los llevaras casi de la mano por un largo aprendizaje.
Los tamaños serán parte imprescindible para posteriores aprendizajes matemáticos, así que asegúrate de que posean el concepto.

La habilidad motriz fina definitivamente sera un requisito para estimular ahora, porque cuando quieras que escriba bonito y si hoy no lo favoreces, mañana no lo exijas al niño porque lo frustraras.

Quizá lo que mas pasamos por alto para que aprenda un preescolar sea la noción del tiempo, damos por hecho que lo aprenderá, mas no imaginamos los contratiempos por los que pasara el niño o la niña cuando en su escuelita le pregunten; ¿ Que día es hoy? o ¿a que hora te levantas?
La noción de espacio resulta tan importante enseñar a los preescolares, que si hoy no se familiariza a los niños por donde caminan, cuando estén en su escuelita no sabrán que es derecha o que es izquierda. 

Ocio para escolares




Si tan solo el aprendizaje se aprovechara en cualquier situación de la vida cotidiana de niños y niñas aprenderían de forma tan natural que sería una delicia el recibir educación desde otro plano conceptual… es mi forma de pensar y por ello te propongo que este verano acerques a tu hijo o hija eso que tanto le cuesta aprender desde otra perspectiva quizá son los números pues aprovecha para prepararle juegos con ellos. 
Tal vez sean las letras…pues hagan colecciones de ellas, elaboren grandes letras para pegarse en su recamara, su puerta e incluso pueden hacer álbumes para recurrir a ellos cuando se necesiten.

Y que me dices de las operaciones matemáticas... porque no pintar una pared con aquello que mas le cuesta al niño (a).
E  incluso un acercamiento al mundo que les rodea no es para restarle importancia ¿porque no  poner a su alcance el lugar donde habita? o descubrir donde habita otros niños. 
¿Estarías de acuerdo conmigo, si te digo lo valioso que es poner al alcance de los niños la existencia de otros planetas y de cómo se llama el suyo?

miércoles, 11 de julio de 2018

Evolución de la motricidad


La evolución de la motricidad en el niño es compleja y sus distantes fases de desarrollo son conocidas. El desarrollo motor, pasa esquemáticamente por varias fases:
  • La primera, que comprende la organización del esqueleto psicomotor, la organización tónica de fondo, la organización propioceptiva y la desaparición de reacciones primitivas. EL ser humano nace con las solas condiciones anatomofisiológicas de sus reflejos, para pasar a actos el niño ha de sentir la resistencia del medio en forma de estímulos procedentes del exterior lo cual viene a quebrantar su equilibrio organizativo que más tarde volverá a organizar. En la medida que se desarrolla el organismo solicita su propia organización.
  • La segunda fase es la de la organización del plano motor. Es como si una melodía cinética se fuera integrando hasta perfeccionar la movilidad corporal.
  • La tercera fase corresponde a la automatización de lo adquirido. En ella el tono y la motilidad no están aislados se enriquecen mediante el condicionamiento e inhibición propio o ajeno, hablando en el sentido de la actividad diaria del niño, entonces la maduración motora va tomando sentido en todo el esquema corporal. En los primeros meses la capacidad motora está muy frenada debido a la hipertonía (tono alto) y la falta de madurez que obstaculizan los movimientos. La evolución motora es pareja de las posibilidades madurativas: primero desaparecen los reflejos primitivos para surgir la acción extensora de las manos, la oposición del pulgar y la rotación de la muñeca. Durante algún tiempo los problemas madurativos tendrán capital importancia porque fuerza, rapidez y precisión dependerán del grado de maduración, de la regulación del movimiento, de la progresiva cronometría y de la capacidad inhibidora sincinética (movimientos inconscientes). 
La referencia del cuerpo únicamente existe en la medida en que lo posee el niño, ya que el esquema corporal no es un dato sino una práctica que evoluciona con la práctica y la imitación. 
Podemos admitir que el comportamiento infantil se expresa en dos niveles de variada complejidad: como comportamiento emocional y como conducta social. A partir de los cuatro años tanto los niños como las niñas reaccionan al mirarles otra persona, aun cuando los niños –menos precoces que las niñas– hasta los cinco no manifestaran su máxima capacidad de reacción. Por tanto es un error estudiar la psicomotricidad tan solo en el plano motor pensando solo en un hombre motor, lo cual nos llevaría a considerar la motricidad como una simple función instrumental puramente realizadora y dependiente de la puesta en marcha de unos sistemas de fuerza que les entraña, tanto si es externa como si es propia del individuo despersonalizando por completo la función motora. Los cambios tónicos y la actividad motora son a un tiempo expresión y reacción, “no existe un límite entre la serie de fenómenos motores y psíquicos”