viernes, 5 de octubre de 2012

Ira y tristeza...


La tristeza es ira pasiva y la ira es tristeza activa.
Como la tristeza surge con facilidad, la ira parece difícil, porque estas demasiado sintonizados con lo pasivo.
Es difícil para una persona triste estar enfadada.
Si puedes encolerizar a una persona triste, su triste­za desaparecerá de inmediato.
Será muy difícil para una persona encolerizada estar triste.
Si puedes entristecerlo, su ira desaparecerá de inme­diato.
En todas nuestras emociones continúa la polaridad básica: de hombre y mujer.
La ira es masculina, la tristeza es femenina.
De modo que si estas en sintonía con la tristeza, es difícil pasar a la ira, pero seria bueno que lo hicieras.
Hacerla estallar en tu interior no ayudará mu­cho, porque una vez más solo buscas algún modo de ser pasivos.
No…..Sácala, exprésala. Aunque parezca una ton­tería, hazlo.
Se un bufón ante tus propios ojos, pero sácala. 
Pero no contra otros, eso es muy importante....aclarar
Si puedes flotar entre la ira y la tristeza, ambas se tornaran similarmente fáciles.
Tendrás una trascendencia y entonces podrás observarle. Podrás estar detrás de la pantalla y, con­templar estos juegos, para luego ir más allá de las dos. Pero primero deberás moverte con facili­dad entre ambas, de lo contrario tenderas a estar triste, y cuando uno se siente atribulado, la tras­cendencia resulta difícil.
Recuerda, cuando dos energías opuestas son exactamente iguales, entonces es muy fácil salir de ellas, porque están peleándose y cancelán­dose entre ellas y no estás sujeto a ninguna.
Tu tristeza e ira están al cincuenta por ciento, son energías iguales, de manera que se cancelan entre sí.
De pronto tendrás libertad y podrás escapar de ellas.
El día no es solo de Dios, también lo es la noche.
A esta forma de mirar  la vida yo la llamo religiosidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por dejarme tus comentarios