miércoles, 7 de octubre de 2015

Confianza


La confianza

Al nacer la confianza es un hecho, pues el bebe espera ser alimentado y cuidado por ti. Durante esta etapa no necesitas cultivar la confianza pues ambos la fluyen. Y para continuar cultivándola te invito a acercar tu rostro, al rostro del bebe acompañandolo de una expresión amorosa. Solo de eso se trata de; acercar y alejar tu rostro. Sera como un acto simbólico pues él bebe te sentirá como te alejas y te acercas e invariablemente la confianza los impregnara.

                                                                                                                               

Surgimiento de la confianza

Al año la confianza no tiene significado alguno pero existe, aunque está en vías de ser fracturada a temprana edad en especial cuando él bebe inicia con sus primeros estallidos emocionales, lo cual reta tu tranquilidad. Para encontrar vías saludables para conducir este tipo de conductas infantiles propongo lo siguiente: por cada estallido emocional del bebe, una indagación deberás hacer… ¿porque llora? ¿que lo hizo enfadar? ¿sabes porque llora, pero no le cumplirás sus deseos?.… pues bien, sea cual sea el origen de los estallidos, para calmarlos deberás mantener la serenidad. Es decir no trates de calmarlo con ternuritas, besos o apapachos, se natural pues él bebe está impregnado de ira y solo lo abrumas o confundes y tu tranquilidad terminara esfumándose. Como también puede llegar a suceder que no seas capaz de mantenerte tranquila y callaras al niño a gritos u obligándolo a dejar de llorar.  Una u otra conducta los envuelve en una burbuja de estallido emocional. Mejor mantente ecuánime, busca el origen y si ya lo encontraste trata de resolverlo, pero si no funciona, cambia de inmediato de escenario, es decir; lleva al niño a otro lado, muéstrale algún juguete desconocido, acércalo al refrigerador, llévalo a mirar a la mascota… cualquier distracción nueva será un excelente calmante. Mantenerte serena y aborda el estallido con naturalidad mediante distintas alternativas serán  actos para iniciar a cultivar la confianza en tu bebe pues no lo estarás agrediendo a temprana edad… así es como se inicia a cimentar solida e inquebrantable la confianza en niños y niñas.

Se sincera (o) con los niños


La confianza en niños de 3 años

Después de los tres años la confianza empieza a tornarse visible. El niño inicia a mirar en mamá o papá la verdad. Su corazón es tan puro que descubre si mientes o le hablas con la verdad. Para cultivar la confianza no requieres de grandes lecciones, bastan altas dosis de conciencia respecto a lo que dices y haces  en la relación con tu hijo. Veamos un ejemplo… cuando dices a tu hijo o hija; -si te portas bien, te llevo de paseo-. A esta edad un niño no sabe que es portarse bien, pero si sabe lo que es llevarlo de paseo. Y aun cuando no se porte bien, como lo esperas, el niño  esperara el paseo y si no se lo cumples abras iniciado a fracturar la confianza entre ambos. Por ello expreso lo importante que es cuidar lo que dices a un niño. Veamos otro ejemplo: - recoge tus juguetes, para que veas tu programa favorito- Estas condicionando al niño. Una norma no se condiciona, se cultiva, así que duplicas el daño. Por un lado lo condicionas y por el otro oprimes la confianza. Por ello expreso lo importante de cuidar lo que dices a un niño.
Serán múltiples las conductas que pongan a prueba la confianza en tu familia, pero si te percatas durante la cotidianeidad lo que dices y haces con un niño te aseguro que detectaras de inmediato cuando estas fracturandola. Así que; solo escúchate y sabrás como asegurar la confianza en tu familia


El efecto de la verdad


Los niños saben cuando mientes

De los seis años en adelante la confianza es un hecho. El niño sabe perfectamente cuando mamá o papá mienten. Se guarda sus secretos o los comparte dependiendo de los niveles de confianza que existan entre el niño y un adulto. A partir de ahora realmente requerirás de altísimos niveles de sinceridad frente a un niño para que la confianza sea una realidad entre ambos. Y no te desgastes en buscarla, mejor centra tus sentidos en la interacción diaria con tu hijo o hija y encontraras la verdad y la mentira de tus actos y los actos de tus hijos. Y por supuesto que si impera la verdad, te aseguro que la confianza florecerá en tu hogar. Pero si descubres que esta facturada la confianza en tu hogar, basta  ir por ella mediante tus actos cotidianos. El niño observara lo sincera que eres contigo misma (o) e invariablemente lo contagiaras de ella… así es como vuelve a renacer.