lunes, 26 de noviembre de 2012

Las Emociones


Habilidad Motora


Solo toma al pequeñito de la cadera y balancéalo de un lado a otro, cuidando que sus piecitos se encuentren firmes y seguros sobre el piso. Cántale, chárlale o ríe con él en tanto lo balanceas de un lado a otro. Una trivialidad de la vida deja huellas de habilidad motora. 

Enharinandote

Un poco de harina, una bandeja grande y tu iniciativa serán los ingredientes necesarios para la aportación que sugeriré. Solo siéntate con el pequeñito a la mesa y jueguen a enharinarse :) :). 
Si a enharinarse, pero los dedos, así que no te alarmes. Cuando de enseñar a leer y escribir se trata, generalmente sugiero que sea de manera lúdica y creativa, así que sin importar la edad solo siéntense a jugar a leer y  escribir letras, textos, frases u oraciones en la harina. Es tan relajante escribir con todo escrutinio letra a letra para dar salida a textos, en cuanto te observe el pequeñito querrá hacerlo también. Así que solo usa tu inventiva, lean y escriban tantas letras, palabras o textos que aparezcan o desaparezcan en la harina. 

El cerebro se fortalece a si mismo


¿Podrían imaginarse vivir en un país donde cada casa tiene teléfono, pero sólo algunos de ellos cuentan con cables para conectarlos? El sistema telefónico no funcionaría. Esta situación es similar al cerebro de sus hijos al nacer. ¡Entre la sexta semana y el quinto mes de embarazo, en el cerebro de un bebé se desarrollan aproximadamente 100 mil millones de células cerebrales! Algunas de estas células cerebrales se encuentran conectadas al nacer, pero la mayoría no lo está. Precisamente, durante los primeros cinco años de vida, el cerebro infantil hace un gran esfuerzo para establecer dichas conexiones cerebrales. ¿Usted ha visto alguna vez lo que sucede al caminar una y otra vez y en la misma dirección en la nieve profunda o en hierba alta? Se forma un sendero. Algo parecido ocurre a medida que el cerebro se desarrolla. Cada vez que sus bebés usan uno de sus sentidos –la vista el gusto, el tacto, el oído y el olfato– se crea una nueva conexión o sendero. Si un niño tiene diversas clases de experiencias y dichas experiencias se repiten una y otra vez, se fortalecen las conexiones cerebrales. De estas conexiones depende la manera en que sus hijos piensan, sienten, se comportan y aprenden.
En los primeros tres años el cerebro habrá hecho muchas más conexiones de las que necesitará en toda la vida. Tal como cuando ustedes le cortan las ramas a un árbol para que se fortalezcan las raíces, el cerebro elimina las conexiones que no se usan con regularidad. Esta eliminación de las conexiones inutilizadas continúa de tal forma que sólo se mantienen las conexiones importantes.

viernes, 23 de noviembre de 2012

Tres ingredientes de vida


Sentir, tocar y vibrar bajo la luz interior de mi hogar...
 el aprendizaje de la semana

Hermoso fin....

Es divino y....


Recien llegado


Solo ofrécele tus dedos  para que se tome de ellos. Ahora sujétalo firmemente y levántalo poco a poco. Estarás estimulando sus primeros reflejitos y mirando un tierno cuerpecito recién llegado.