martes, 5 de marzo de 2019

Encopresis


El problema que refiere la falta de regulación en la evacuación, normalmente diurna, hablo de una defecación involuntaria, y no debe ser atribuido a una enfermedad física. Niñas y niños que se hacen popo en los calzoncillos, en especial después de los cuatro años, alude a un problema de esfínteres y puede ser primario o continuo, son niños que requieren de un entrenamiento más que una psicoterapia, son niños que no tuvieron un entrenamiento adecuado sea porque se les obligo, castigo o reprimió por hacerse popo en los calzoncillos. Para resolver este tipo de problemas el punto de partida es la actitud de los padres, hablo de no hacer sentir al niño (a); sucio, desobediente o mal portado son devaluaciones que impactaran directamente en el control de esfínteres pues el pequeño experimentara una sensación de desobediencia, y para cuando quieras que el niño defecar en el baño no lograra conseguirlo porque carece de confianza en él o ella. Así que; muy pendiente de tu actitud, si es que tu hijo (a) presenta este problema. Cuando al niño (a) le gane en los calzoncillos es mejor decirle que lo van a resolver juntos a exigir que defeque en el lugar adecuado. La utilización de refuerzos positivos son importantes unidos en el momento de reentrenar al niño tales como; recompensas, leerles en el baño, animarlos hacer popo, cantarles mientras esperas para que evacuen. Refuerza gradualmente las aproximaciones a la defecación, es decir el acto de pujar para evacuar; explícale al niño como debe hacerlo, motívalo para que repita los gestos como si estuviera defecando, quédate con él o ella unos momentos en el baño hasta que consiga defecar y de no conseguirlo no te desesperes, repitan el entrenamiento varias veces hasta lograrlo, y si se levanta del baño y se hace en los calzoncillos no lo reprimas diciendo al niño que porque no defecto cuando estaba sentado, mejor invítalo a que la próxima vez así como defeco en los calzoncitos ahora deberá hacerlo en el baño. Entrenar adecuadamente sin desesperarse, ni urgir al niño (a) es la vía para lograr que los niños recupere la confianza para hacer popo. Por un día que omitas el entrenamiento en el baño un importante rezago se presentara.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por dejarme tus comentarios