miércoles, 15 de noviembre de 2017

Leer para comprender

A continuación te presento una investigación que alude al proceso de leer, una situación por la que necesariamente atraviesan niños y niñas para llegar a comprender el sentido de lo que leen. Datos que han sido extraídos de una investigación realizada por Emilia Ferreiro en su libro; sistemas de escritura en el desarrollo del niño.
1.- Divorcio entre descifrado y sentido
Sentido sin descifrado.- el niño busca el sentido a partir de la imagen y responde con un nombre o varios nombres yuxtapuestos y ocasionalmente con una oración. En algunos casos, que son los más interesantes, el niño trata de tener en cuenta algunas propiedades del texto, haciendo corresponder a los cortes reconocidos en el texto (blancos entre las palabras) con los cortes de la emisión. En el momento de dar una respuesta, estos niños van indicando con el dedo las partes del texto mientras hacen corresponder a cada silaba una emisión sonora.




Por ejemplo para el texto; “el pato nada” tres niños dan diferentes lecturas;
Primer niño; “pato, agua, flor”
Segundo niño; pa-ti-to
Tercer niño; pa-m-to`
Descifrado sin sentido
El niño no busca el sentido ni en la imagen ni en el texto, se limita a descifrar elementos aislados ya sea identificando letras sueltas o bien construyendo silabas sin sentido.
Veamos ejemplos de esas dos variantes;
Texto; “es un lindo día” 
Lectura; e – s- u- n- la-l-i-n-la-d-i-la-a
Texto; la nena está sentada
Lectura; ei, se, los,  is, io, so
2.-Conflicto entre descifrado y sentido
Primacía del descifrado.- el niño es capaz de anticipar el sentido del texto a partir de la imagen, pero sabe que el texto no es enteramente predictible a partir de la imagen. Opta entonces por descifrarlo para encontrar el sentido preciso pero al hacerlo pierde el sentido, al quedar atrapado en las exigencias de un descifrado exacto. En casos extremos, los niños parecen leer correctamente, ya que no cometen errores en el descifrado, pero no tienen la menor idea del sentido del texto.
Veamos un ejemplo frente al siguiente texto; “es un lindo día”
Primera lectura; es  un-en-li-o-di-da
Segunda lectura; es un li-n-d-do-d-i-a
Cuando preguntamos a estos niños que quiere decir lo que acaban de descifrar responden; “no se”          
Primacía del sentido.- El punto de partida es semejante al anterior pero en este caso el niño permanece centrado en la búsqueda del sentido. La respuesta final consiste en una oración o una frase nominal compleja resultante de la integración.
Veamos un ejemplo frente al siguiente texto;  “la mano del mono tiene dedos”
Lectura; la ma-no d-e-l mo-no ti-ne-dos
Cuando preguntamos qué quiere decir eso, el niño contesta; Tinedo es el nombre del mono.
Observamos conflictos centrados en el acuerdo gramatical entre el artículo y el nombre; el nombre es anticipado en función de la imagen y el artículo es descifrado.
3.- Coordinación entre descifrado y sentido.- En esta categoría ubicamos los casos que llegan a una respuesta correcta, pero ello no significa que se obtenga de inmediato. Por el contrario el niño suele pasar por un largo proceso antes de llegar al resultado final de tal manera que encontramos procesos lentos de coordinación, autocorrecciones inmediatas para llegar a la correcta lectura.
Veamos un ejemplo: "la ranita salió de paseo"
¿Qué dice entonces? la rana sa-le pasea
¿Qué dice aquí (salio)? la rana pasea
la ranita sa-lio pa-seo; la ra-ra-na sa-lio de pa-se-o

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