Plastilina o masa de uso didáctico serán un excelente medio
para estimular en el niño los conceptos de largo y corto. Solo siéntense a la
mesa y jueguen en un primer momento a amasar, estirar o enrollar la masa. Pasen
al momento vital; hacer viboritas de plastilina largas o cortas. Asegúrate de
ir mostrando al niño como hacer las viboritas. Detente a enseñarle el largo de
cada una de ellas, a hacer comparaciones de tamaños, a intercambiar viboritas,
a clasificarlas por longitudes, a deshacerlas. Etc. Un simple recurso prepara
al niño para asimilar y acomodar los conceptos de; largo y corto.
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