Para estimular el pensamiento del niño solo basta proveerte
de dos vasos de plástico y una jarra pequeña con agua. Vierte un chorrito de agua en uno de los vasos y pídele que la vierta
en el vaso vació, ponle otro chorrito de agua y repite la acción varias veces a manera de que el niño haga cálculos
para llenar y vaciar los recipientes. Gradualmente la complejidad del juego se irá
incrementando hasta llenar los vasos con agua, vaciar el agua a la jarra y volver a iniciar. Todo ello estimulara en tu pequeño; atención, control de manos,
equilibrio, concentración y por supuesto control total de sus emociones para no
derramar el agua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejarme tus comentarios