miércoles, 22 de febrero de 2017

La timidez en el niño

La timidez se caracteriza por la experiencia de un conflicto ante la presencia de extraños sean adultos, como niños y se expresa casi siempre en las convivencias sociales mediante formas como mantener la distancia, evitar el contacto visual, huir, cerrar los ojos, fijación e inmovilidad. En casos extremos de timidez el niño expresara su temor a las relaciones sociales incluso por adelantado tratando de forma llorosa evitarlas. Ante la situación social temida el niño se refugiara en su madre o padre, se esconderá detrás de él o ella,  de un objeto y se negara a responder a cualquier pregunta. Dichos extremos de timidez son mucho más raros que las variedades comunes de avergonzarse, sonrojarse o tener dificultades de socialización, casi siempre son temporales y típicas en los primeros años de edad o durante la adolescencia. El niño temeroso – tímido es aquel que pierde facultades cuando no está solo, que vacila, no sabe qué hacer, realiza esfuerzos por pasar inadvertido, al niño tímido todo le sale mal cuando se siente observado.
Las causas  más importantes de la timidez son:
a).- La manifestación por parte de los padres de un cierto menosprecio del comportamiento del niño tímido, sobre todo cuando el padre espera que cause buena impresión, el niño suele actuar de forma contraria; así la desilusión de los padres se transforma en impaciencia, enfado y la expresión de dicho enfado hace aumentar más la timidez del niño.
b).- Los niños contraen la timidez a causa del temor que les produce la presencia de la gente y esto no ocurre una vez sino de forma repetida durante la infancia y en la pubertad antes de que sean capaces de responder a los demás o de socializarse. Existen muchas ocasiones en que los adultos se acercan a los niños con buena intensión pero en la práctica, bien sea por la expresión, bien por la actitud los sienten como amenazantes; la voz del adulto es sentida como demasiado alta para su sensibilidad, como puede ser igualmente los gestos sentidos como demasiado bruscos y cuando esto ocurre, el niño compara normalmente el modelo de los extraños que le producen temor con el parental. En cualquier caso siempre que percibe un ambiente de novedad o extrañeza que no puede superar o entender del todo, nace en él  o ella una actitud negativa, quizá menor pero real, todo junto puede propiciar que el niño se inhiba fácilmente sintiéndose incapaz de hacer lo que se le pide que haga.
¿Que produce la timidez?
c).- El temor a no ser querido y derivadamente a ser rechazado es una de las causas de la timidez. El niño teme que los demás le retiren la estima  y esto es una amenaza muy real para ellos puesto que justamente depende de ellos, de los niños. La impaciencia y la irritabilidad que se muestra cuando el niño llora, cuando hay descontrol de los esfínteres, cuando se presentan problemas para ir a la cama  es el efecto sutil pero real no solo de sentirse no querido, sino rechazado y castigado. Puesto que los padres son casi los únicos modelos adultos para el niño, es natural que transfiera sus actitudes y sentimientos hacia ellos.
d).- Cuando los padres son poco sociables no tienen o tienen pocos amigos y sobre todo si se manifiestan tímidos ante los mayores o sufren por sentirse menos apreciados que los demás lógicamente contribuyen a crear en el niño una personalidad tímida.
e).- Timidez condicionada por una necesidad de defensa. Habitualmente el niño o niña que se ve con menos capacidad o fuerza física para resistir a las circunstancias que predominan en su ambiente, muestra un aspecto de inferioridad y timidez para evitar ser atacados e incluso para ser compadecidos, es decir, desea ser considerado como inferior puesto que le resulta más beneficioso para su seguridad.
f).- Los padres extremadamente rígidos o exigentes producen actitudes negativas en el niño y puede sentirse incapaz  de cumplir lo que se espera de él o ella lo cual puede generalizarse a situaciones  sociales donde en un principio podían sentirse a gusto. Si los niños no tienen la gracia o destreza social que se les exige, los padres deben proporcionarles otros modelos sociales que le resulten mas accesibles.
g).- La sobreprotección causa sentimientos de timidez al poner trabas a la socialización del niño haciéndole vivir de forma limitada y dependiente del esquema de comportamiento que le imponen los padres perdiendo la posibilidad de aprender a tomar decisiones por su cuenta.

Lo que no se debe hace cuando un niño es tímido



  • No le pidas que se comporte
  • No te disgustes o enfades frente al niño por su timidez  
  • No le manifiestes excesiva preocupación
  • No pidas que te diga porque es tímido
  • No actúes  sobreprotectoramente
  • No castigues su conducta tímida del niño
  • No manifiestes sarcasmo, burla o menosprecio por  la timidez del niño


Que se debe hacer ante la timidez

  • Rescata al niño de preguntas adultas
  • Busca espacios donde el niño se sienta a gusto
  • Acompáñalo en sus titubeos y después déjalo que se aclimate
  • Manifiéstale una actitud comprensiva
  • Refuerza tu afecto por el niño mediante palabras cálidas
  • Aumenta la seguridad en ti y en el niño
  • Analiza que le produce timidez al niño para crearle recursos que lo ayuden a superarla
  • Propicia encuentros entre el niño y niños de su edad, diferente a su entorno escolar
  • Genera encuentros entre el niño y voces adultas de otros entornos
  • Acompáñalo (a) en sus nuevas experiencias al contactar con desconocidos
  • Refuerza y anima sus primeros intentos por contactar con otros
  • Alienta constantemente la comunicación por diferentes medios; telefónica, internet, mail, presencial, familiar, amigos.

Como hablar para que los niños escuchen







Un libro que encontré por la red, me parece excelente, puedes descargarlo en la liga que te dejo 

miércoles, 15 de febrero de 2017

Estimulando la cabecita del bebe.


Las sensopercepciones, es decir mirar y sentir el entorno que rodea al bebe, es una forma ideal para estimular su pensamiento puedes hacerlo diariamente por unos segundos cuando esta despierto tu bebe haciendo lo siguiente: toma un juguete muéstralo al bebe, di su nombre y colócalo a un lado, muy cerca, lejos, entre sus manos espera a que reaccione con la cabecita o la mirada en ello consiste el ejercitamiento (voltear o mirar). Vuelve a repetir la acción: mostrar el juguete, hablarle y colocarlo en diferentes posturas. Realiza lo mismo pasada una semana con otro tipo de juguete, cuidando que sea mediano y con una intervención rápida y ligera de palabras.  

Estimula volúmenes en niños de 1 año

Las sensopercepciones, es decir mirar y sentir, es la vía para estimular el pensamiento del niño de esta edad. Puedes iniciarlo a contactar con volúmenes para ello solo prepara pelotas de dos tamaños grande – pequeña. Sentados al piso y a un mismo nivel jueguen a rodar las pelotas, primero una y después la otra. Al iniciar a jugar procura hacer énfasis en el tamaño, el color e invita al bebe a ir por la pelota gateando. Realiza la misma alternativa cambiando de postura es decir uno frente a otro, muy cerca, muy lejos, a un lado, al otro y con otro tipo de material  que ruede como globos, botellas, tapas, rollos de papel, naranjas, manzanas, limones etcétera. Realiza la misma propuesta pasada una semana alternando los materiales propiciaras habilidades a nivel psicomotor grueso, fino, percepción, lenguaje y más… es como estimular integralmente el pensamiento de tu bebe.

Estimula volúmenes en niños de 2 años

Para estimular volúmenes en pequeñitos de 2 años las burbujas son ideales para percibir el efecto del agua con jabón y un popote o bien puedes comprarlas, solo requieres invitar al bebe a mirarte como haces burbujas. Inicia lanzando burbujas al aire y pide al niño que las atrape, después haz burbujas grandes muy grandes y lánzalas alto, muy alto, di al niño su nombre, su tamaño espera a que la atrape y vuelve hacer otra burbuja, solo que ahora procura que sea pequeña lanzándola a una misma distancia e invitando al niño a atraparla. Lo importante de la propuesta es hacer burbujas en un primer momento grandes, muy grandes, después pequeñas a una misma distancia para que se percate el niño de los volúmenes, más tarde puedes hacer burbujas de diferentes tamaños, a diferentes distancias y alturas. Llevar al niño a mirar volúmenes, distancias y formas es un juego idóneo para estimular su pensamiento y quizá ese frasco de burbujas las puedas aprovechar para otra ocasión haciendo lo siguiente; sentados a la mesa coloca una hoja de papel, haz una  burbuja, déjala caer en la hoja, lenta, muy lentamente para que el niño tenga tiempo de mirar como haces la burbuja, como cae sobre el papel y como desaparece finalmente invítalo a diluirla con su dedito sobre la hoja.

Nota: es recomendable que solo tú hagas las burbujas pues para esta edad al niño aun le cuesta realizar el soplido, de querer hacerlo estará bien, solo que enséñale previamente.