viernes, 30 de mayo de 2014

Terapia de lenguaje

Método Mcginnis
“Mcginnis no necesita de alabanzas: su trabajo sigue siendo fecundo a diez años de su muerte y seguirá siéndolo siempre. Lo que supo dejarnos ha servido para ser ampliado, para adaptarse,  para modificarse y para utilizarse de mil maneras. Macginnis sentó las bases para trabajar, nos transmitió su energía pedagógica vital y su fe en que el niño que no habla, llámesele como se le quiera llamar, no importan las etiquetas. Las finuras en la terminología etológica y nosológica no nos deben detener”. María Paz Berruecos.
Extracto de la autora de un método  de terapia de lenguaje. Método que  ha sido como mi biblia para contribuir en la terapéutica del lenguaje de los pequeños. Recién iniciaba mi trabajo terapéutico de lenguaje con pequeñitos, hace 20 años, cuando tuve entre mis manos este método.
Consiente del hecho, de que un niño pequeño de tres años puede llegar a presentar trastornos de lenguaje, Mcginnis insiste en su método la necesidad de orientar en forma adecuada a los padres  para lograr que contribuyan también en la terapéutica el lenguaje de sus hijos despertando su interés mediante los siguientes aspectos:
Despertar en el niño su interés por comunicarse verbalmente
Propiciar actividades que le ayude a mantener su atención por periodos largos.
Proporcionarles materiales para lograr un mayor desarrollo de las percepciones visual y auditiva.
Situar al niño en casa y fuera de ella rodeado de todo aquello que le permita satisfacer su curiosidad natural.
Premisas que puede aprovechar todo padre de familia para contribuir con su pequeño en esta gran hazaña que es; hablar


lunes, 26 de mayo de 2014

Estimulación Temprana

Sin duda alguna existe en el niño esquemas de pensamiento que se desarrollan a medida que son estimulados por el entorno. Y pueden activarse por estímulos táctiles, visuales, auditivos, sociales, culturales o bien modificarse.
Pero también existen particularidades del  desarrollo infantil que hace de cada niño un ser diferente a los demás y esto se debe en gran medida a las diferencias madurativas y estímulos que recibe.
Para desarrollarse el niño necesita de estímulos y si los estímulos externos no existen o son insuficientes la organización de la corteza cerebral se detiene o se desarrolla lentamente. Por otra parte recibir estímulos anormales o dañinos para su desarrollo puede dar pauta a modelos de comportamientos inadaptados. La falta de estimulación es desfavorable para el desarrollo del niño pero de igual manera una sobreestimulación también resulta desfavorable.
Los estímulos no solo tienen un valor informativo, también tienen un valor formativo dependerá en gran medida como elijas estimular al pequeño y sobre todo la capacidad que el adulto posea para encausar al niño en el arte de estimular su desarrollo.
Si bien es deseable que las estimulaciones sean múltiples y variadas lo importante es que se den dentro de una atmosfera afectiva sin tropiezos entre madre e hijo.
Una madre o un padre que desean estimular a su hijo deberán poseer una gran capacidad de percepción y análisis para encausar el desarrollo del niño ajustándose exclusivamente al interés del pequeño y no a lo que desea el adulto. 

viernes, 23 de mayo de 2014

La música y los sonidos ambientales

La música y los sonidos ambientales son un excelente recurso para iniciar al niño a desarrollar su capacidad auditiva. Capacidad que a futuro contribuirá   en su lenguaje.
Desde que nace el bebe ya es propicio estimular su lenguaje, solo necesitas dotarte de una cantidad generosa de música infantil para ser escuchada o tarareada por el pequeño. Procura que la música contenga letra clara y sea corta. Y respecto a los sonidos ambientales cuida que sean sonidos de su entorno como el gato, el perro, los pájaros, el coche, etc, o bien pueden ser grabados para que el niño los escuche y los repita. Elije de dos a tres días para estimularlo  durante 5 minutos.  

Entrena el lenguaje adecuadamente en tu hijo

Estimula el lenguaje del niño de 2 y 3 años iniciándolo a familiarizarse con la estructura de las palabras. Solo elije palabras cotidianas y simples que emplees  durante el día como; pan, leche, agua, vaso, etc. Dispón de 2 o 3 días para estimularlo por 5 minutos.
Inicia emitiendo una de las palabras con los sonidos aislados, continua emitiéndola por silabas y finalmente emitela con todos sus sonidos, es decir completa. Asegúrate que el niño mire la articulación de tus labios en el momento de pronunciar la palabra que estas entrenando. Motívalo hacer los ruiditos o chasqueos que haces cuando vas aislando o fraccionando la palabra. Para un segundo día puedes emplear la misma palabra, solo que ahora combinarla con frases o conversaciones sencillas como: come el pan, dame el vaso, etc. Continua de la misma manera con el resto de las palabras.
Si partes de una palabra siguiendo los pasos que te dado y vas incrementándolas de manera constante, el niño se familiariza con ellas, aprendera a pronunciarlas de manera adecuada y por lo tanto su lenguaje ira adquiriendo mayor estructura.

Le cuesta trabajo pronunciar una letra a tu hijo?

Si al niño le cuesta trabajo pronunciar alguna letra (onomatopoeya) y ya tiene 3 o 4 años  a continuación te comparto una secuencia de praxias rápidas para estimularlo. Te recomiendo que no abuses del ejercitamiento y complementalo con un programa terapéutico de lenguaje.
- Comenzaremos doblando la punta de la lengua hacia arriba y hacia atrás, con ayuda de los     dientes superiores.
- Sacar la lengua fuera e introducirla en la boca.
- Mover la lengua (dentro y fuera de la boca) de derecha a izquierda y  de arriba abajo.
- Estrechar la lengua entre los labios y luego poner la lengua ancha.
- Relamer el labio superior e inferior.
- Situar la punta de la lengua en los incisivos inferiores por delante y por detrás.
- Relamer los dientes superiores por delante y por detrás, después hacer lo mismo con los inferiores.
- Ensanchar la lengua entre los dientes y posteriormente dejarla descansar en el suelo de la boca.
- Llevar la punta de la lengua a las muelas superiores de derecha a izquierda, al igual que con las muelas inferiores.
- Hinchar con la lengua la mejilla derecha e izquierda.
- Llevar la punta de la lengua a la campanilla.
- Llevar la punta de la lengua a la campanilla.

Elije de 3 a 4 alternativas para realizarlas con el niño durante 15 minutos 3 veces por semana.  

lunes, 19 de mayo de 2014

Belleza infantil

Cuando un niño nace es una pizarra vacía, una tabula rasa; no hay nada escrito en él. Esa es su belleza: el espejo no tiene polvo. Puede ver con más claridad.


Relación madre - hijo

Al nacer, el niño está dotado de tal manera que parece responder de una forma especial a los estímulos que provienen de quienes que le rodean, en especial de los padres y sobre todo la madre. Es una manera tan peculiar de contactar con la madre que surge la relación  madre- hijo abriendo paso al apego. En un principio la sonrisa parece ser el primer indicio de la relación. Es una sonrisa de tal finura y tonalidad que dará pie  al lenguaje del pequeño. Y esto solo puede ser comprendido como la apertura de un gran sistema en desarrollo, un sistema conocido como; relación madre – hijo. Un sistema dispuesto a funcionar a lo largo de los años. Una relación que a futuro madre e hijo utilizaran para integrarse, expresar sus sentimientos y constituir una relación basada en el lenguaje formal.
Primero surge la sonrisa – reacción, posteriormente pasa a la sonrisa – dialogo situaciones que darán paso las primeras relaciones del niño acompañadas de llantos o gritos y sus  primeras vocalizaciones lo cual podría interpretarse como sus primeros signos del lenguaje. Ante ello se sugiere que la madre permanezca atenta a estos signos y otorgue el valor a lo que el niño quiere expresar.
La madre al identificarse con el niño sabrá lo que siente el pequeño y estará en condiciones de cubrir sus necesidades. Estoy hablando de una adaptación de la madre hacia el niño.
Pero esta relación no se cierra solo a madre e hijo, se abre a tal grado que de ser una relación de dos,  pasa a ser una relación múltiple donde interviene familia, cultura y sociedad.