martes, 28 de octubre de 2014

Como comen los niños

Algunos niños comen como elefantes, pero otros comen como pajaritos, incluso puede que un niño de un año coma la cantidad de un bebe de nueve meses así que no midas o compares como come tu hijo respecto a otros niños. 

Incongruencias de los padres

Una de las incongruencias mas acentuadas que cometemos como padres se presentan a la hora de la comida, pues sin desearlo enseñamos al niño a ser falso, mentir o ser iracundo, te diré como surge. Cuando le dices a tu hijo que lo amas, despliegas hacia él  o ella dulzura, ternura, cariñitos, etc. y llegado el momento de comer te transformas en una madre o un padre exigente, iracundo o agresivo para obligarlo  a comer, creamos de inmediato una fractura en la relación, una desestabilidad emocional pues el niño no sabrá porque te enojas, si él no quiere comer, no sabe como reaccionar ante tu ira por lo que genera conductas para defenderse de ti, decirte que si, pero no comerá, tratar de agradarte, etc. en pocas palabras le estas creando una doble personalidad, lo estas confundiendo emocionalmente y tu deseo porque tu hijo se alimente quedara obsoleto. Alimentarse bajo tempestades emocionales, no es alimentarse, es fracturar un sano desarrollo emocional en el niño.

!Mastica bien la comida!

Comer es una situación que demanda al niño desarrollar múltiples aprendizajes y habilidades desde el momento de nacer. Al principio alimentarse para el niño solo es cuestión de succionar la leche de mama o la mamila, pero llegado el momento de comer alimentos sólidos nuevas habilidades deberá desarrollar y una de ellas será el “masticar”. Antes del año se iniciara a descubrir cómo se mastica, ¿que es masticar? Y masticar para un niño es todo un aprendizaje que le demandara tiempo, comprensión y habilidad para mover adecuadamente los órganos de la boca hasta dejar los alimentos correctamente triturados para tragarlos como se lo pide mama. ¿Observas? como el  acto de masticar a un pequeño le  demanda adquirir habilidades y aprendizajes. La sola palabra masticar ya le implica nuevos aprendizajes pues deberá comprenderla y responder a ella. Cuando le dices al niño; ¡mastica bien la comida!, le hablas en un idioma que no entiende, no te entiende, sin embargo la naturaleza humana es tan maravillosa que el pequeñito por pura imitación te empieza mirar como llevas la comida a la boca, mueves lo labios y el maxilar, así es como el bebe intuye que estas moliendo con los dientes percatándose de lo que le pides. Enseñar al niño a masticar la comida requiere de patrones de imitación, si no le muestras como hacerlo no  le pidas que mastique bien pues no sabe cómo hacerlo, mejor enséñale como se hace. La mejor manera de enseñarle al niño a masticar la comida es llevarte a la boca un bocado, dejar que te mire como abres la boca, introduces el bocado, inicias a masticar e ingieres el bocado pasado un tiempo. Cuando hayas realizado varias veces este acto de masticar con tu pequeño  y el sepa como hacerlo ahora si pídele que ¡mastique bien la comida!.  

martes, 21 de octubre de 2014

Si le pegan al niño en la escuela

Si le pegan al niño en la escuela, él debe aprender a defenderse, expresión que escucho de quien está involucrado en el desarrollo de un niño o niña, sean los abuelos, los tíos o amigos cercanos. El niño debe aprender a defenderse por sí mismo, argumentos que buscan solidarizarse con el padre o la madre del niño o niña, argumentos que solo son paliativos pasajeros que en nada contribuyen con los padres del niño y el niño mismo, lo real es que el niño ha sido violentado. Como padres deseamos tener alternativas para ayudar al pequeño ya sea que apliques los consejos que te da la familia, acudas a un especialista para recibir orientación o actúes según tu intuición. El porque le pegan  a un niño en la escuela tiene varios orígenes, sea que la escuela no cuenta con los controles adecuados para regir la disciplina de sus alumnos, sus reglas son altamente permisibles, sus grupos son numerosos y se presta para el descontrol y la violencia o quizá el adulto al frente del grupo ha perdido el control de aquellos niños que son violentos. Por el lado del hogar bien puede ser que el niño o niña sea hijo (a) único y no han vivido este tipo de violencias, quizá se relacione únicamente con adultos y no ha convivido con niños de su edad o tal vez es un niño tímido e inhibido de baja autoestima y permite que otros le hagan lo que deseen, estos son algunos de los referentes del porque le pegan a un niño en la escuela, pero la situación no se centra en el origen se centra en el que hacer y para ello te propongo las siguientes líneas de actuación:
  • Cuando un niño ha sido violentado y te señala la mordida, el golpe en la cara o la cabeza, toca suavemente la violencia que recibió el peque, solidarízate con él, abrázalo, consuélalo y jamás cometas el error de regañarlo o decir que se ponga abusado, que se defienda, mucho menos estalles en ira frente a el, si lo haces el niño se culpara y pensara que estuvo mal y cuando le vuelvan a pegar ya no te dirá nada.
  • Al enterarte de que le pegaron a tu hijo o hija toma las medidas correspondientes a la brevedad, no dejes pasar el tiempo.
  • Informa de inmediato a la  autoridad de la escuela y pide su intervención directa.
  • Indaga que niño pego a tu hijo o hija, no para tenerlo en la mira, no, para protegerlo de él o ella.
  • Si la violencia ha sido grave comunícalo a las autoridades externas que tengan injerencia con la violencia infantil.
  • Revisa diariamente el estado anímico del niño al salir de la escuela, al bañarlo observa cómo reacciona al tocar su piel,  busca si hay lesiones en su cuerpo, vigila su sueño, si es tranquilo o tiene pesadillas, si rechaza la escuela, indaga si juega con otros niños, pregunta a la maestra como estuvo en clase, etc.
  • Solicita a la maestra del grupo; que siente a tu peque alejado del niño que pega, pero si tú hijo o hija busca al niño que le pega no lo reprimas, mucho menos le digas que no se lleve con ese niño, mejor dile que se retire de el y si le vuelve a pegar que avise al adulto del grupo.
  • Asegúrate de seguir tu solicitud a la autoridad de la escuela y pregunta a la maestra cómo va el caso del niño que pega.
  • Mantente alerta de la conducta de tu hijo y si observas que el niño aprendió a pegar abórdalo sutilmente indicándole que no se debe pegar.
  • Y si a tu hijo le vuelven a pegar, será necesario que tomes medidas más drásticas, ya sea que lo cambies de grupo o de escuela pues es más valioso vigilar la seguridad y salud emocional del niño o niña a seguir en la comodidad de lo conocido.
Cuando le pegan a un niño o niña en la escuela es vital actuar  inteligentemente tanto con las autoridades correspondientes como con tu hijo disminuirás tu ansiedad y no cometerás errores de más de lo mismo como el clásico; -tú también pégale-

martes, 14 de octubre de 2014

Retraso simple de la palabra

Existen niños que solo presentan un retraso simple del lenguaje, el cual consiste en un retraso homogéneo en la aparición el lenguaje, retraso considerado como inmaduro. Por otro lado cuando existe un retraso afectivo la tonalidad y la articulación del lenguaje se modifican. El retraso del lenguaje por lo general es detectado por los padres a partir de los 3 años y hacia los 5 años los niños que presentaron algún retraso de lenguaje, la gran mayoría de los pequeños, adquieren un lenguaje normal.

Retraso de la palabra

El retraso de la palabra suele asociarse a un retraso del lenguaje, sin embargo no debe asociarse con los trastornos del lenguaje de origen sensorial o motor. El retraso de la palabra se manifiesta por alteraciones que el niño comete al expresar palabras o aproximaciones fonéticas. Dichas aproximaciones son sobradamente conocidas y observadas por los padres en tanto el niño se encuentra en crecimiento.

Trastornos de la articulación del lenguaje

Los trastornos de la articulación del lenguaje tienen un origen de tipo anatómico, sensorial, motor o funcional y se distinguen por la deformación de los fonemas reemplazados o suprimidos según se halle deformado el punto de articulación. También existen los trastornos de percepción auditiva, los cuales pueden ocasionar una inadecuada discriminación de las características propias de cada fonema, dificultando de esta manera la articulación.
Cuando la falta del oído es grave, no hay lenguaje o lo hay pero muy escasamente. Cuando es parcial pero extenso, se da un retraso que varía en diferentes grados generando una  deficiente articulación. En los trastornos auditivos se señalan tres tipos de deficiencias que podrían afectar las consonantes de menos precisión como la l y la r. Las consonantes que son de naturaleza audiomotora como la  k y g,  y por ultimo las consonantes más semejantes en la escala de sonidos como la s y z, f y v.
Las lesiones cerebrales  también pueden originar defectos de lenguaje. Algunas investigaciones afirman que; si la lesión cerebral aparece antes de los tres años, la recuperación es completa y muy rápida. Mientras que si la afasia aparece entre los 11 y 14 años la recuperación no es tan rápida.

martes, 7 de octubre de 2014

Genios

Cada niño nace con unas posibilidades y un potencial tan grande que si se le permite y se le ayuda a desarrollar su individualidad sin ningún obstáculo, tendremos un mundo hermoso, tendremos una enorme variedad de genios. Los genios aparecen en muy raras ocasiones, no porque no nazcan a menudo, no; los genios aparecen en raras ocasiones porque es muy difícil escaparse del condicionamiento al que los sometemos.

¿Desesperada porque no come tu hijo?

Solo las madres que hemos tenido hijos que no comen sabemos lo que es la angustia porque nuestro hijo no se alimente. Yo hacía de todo, hasta teatro para que mi hijo comiera y ni aun así el hombre comía, hoy tiene 30 años y come más que yo. Desde que nació casi no comía y en la guardería menos, siempre me tenían reportes de que no comía. Llegaba a casa y así le pusiera payasos a la comida, el niño no comía. Me sentía tan frustrada que no dormía, pensando en el que hacer. Cuando iba al pediatra para que  lo revisara, tranquilamente el Doctor me decía; - el niño está en su peso-, -no tiene por qué alarmarse-. Pero aun así le pedía vitaminas, consejos, recomendaciones, le hacía todo tipo de preguntas del porque mi hijo no comía. Y entraba aún más en crisis cuando por algún motivo miraba a mi hijo y a otros niños de su misma edad (entre 1 y 2 añitos) gorditos, grandotes, rebozantes y al mío lo veía flaquísimo, debilucho y eso me desesperaba aún más. Conclusión;  conozco el sabor de la desesperación o la angustia del porque nuestro hijo no come, se lo que se siente, pero a  ti quizá te urge, que te diga que hacer, como remediarlo. Si, ambas ya sabemos que se siente, ahora solo estas urgida por la solución. Pero permíteme decirte que no existe solución, la única vía de salida, es mirarte a ti, respecto al como alimentas a tu hijo, solo ahí encontraras el que hacer, contigo misma. Hace treinta años yo, no supe remediarlo y no miraba mi ansiedad, no me miraba consumiéndome por dentro, solo me centraba en la ansiedad  y no me detuve a observar que mi hijo era de estómago pequeño, que su naturaleza era de complexión delgada, era un niño que no comía en grandes cantidades, comía solo lo que su estómago le pedía.

¿Porque no come el niño?

La transición entre la lactancia y  la comida solida es una verdadera proeza infantil. Y digo una proeza porque se entremezclan infinidad de factores tanto orgánicos como emocionales, motivos del porque no come el niño.  
Antes del año el niño empieza a familiarizarse con diferentes sabores, olores y texturas respecto a la diversidad de alimentos que le presentas, por lo tanto deberá estar listo para recibir y aprender por si solo a alimentarse, sin considerar si tiene o no hambre. Descubrirá los sabores que le producen placer, las comidas ricas, pero también tropezara con alimentos que no tolerara su mirada, olfato o gusto. Tal vez te ha sucedido que cuando el niño mira la comida, aun cuando no la haya tocado, te dice de inmediato que no le gusta, por lo que  tú responderás; -pero si no lo has probado-, tal vez no te percataste que fue la mirada quien inhibió su apetito por ello la vista es uno de los factores que determina si come o no el niño. O quizá aun antes de sentarse a la mesa el niño ya olfateo aromas fuertes a comida o desagradables y ante esto el niño asocia de inmediato su olfato con el acto de comer y cuando llegues con el plato de comida  a la mesa, él ya estará predispuesto para rechazar la comida y si lo obligas para que pruebe un bocado, estará listo para vomitarlo, porque su olfato intervino previamente. Quizá no paso nada de esto, pero sucedió  que cuando el niño se sentó a la mesa al sentir el impacto de lo caliente,  lo amargo, salado e incluso lo dulce no le agrado y terminara rechazando la comida,  así que, ahí tienes por qué el niño no come,  sin considerar que el pequeño deberá lidiar con mama porque ella realizara infinidad de intentos, trucos y hasta magia para que coma, pero si él detecta algún sabor, textura o mira desagradable la comida, así te pongas de cabeza no lo comerá surgiendo las pataletas, la crisis o el llanto y sumado a ello tu ansiedad porque el niño no come. Así que no equivoques el camino, si tu bebe no come,  analiza los factores que te he compartido en tu pequeño y elimina o cuida que el niño no este expuesto alimentos que alteren sus sentidos previo a su alimentación y si erradicas estímulos externos como animarlo a comer, ponerle al oso para qué coma o decirle que le de comer a sus muñecos, eso no funciona porque el niño ya sabe que solo lo tratas de convencer. Si el niño tiene hambre y le agrada la comida no requerirá de estímulos extras.