miércoles, 16 de diciembre de 2015

De compras con los niños

En tanto haces tus compras navideñas tu hija o hijo están aprendiendo de todo. Desde hacer cálculos bajo una mesa, mover su cuerpo de un lado a otro para estabilizarlo en un pequeño redondel, calcular alturas bajo una mesa, una escalera o una silla. Experimentan con su cuerpo al girar, correr, saltar, estar sentados, dan rienda suelta a toda movilidad de su cuerpo pues los espacios abiertos los invitan a moverse. Exploran por naturalidad; edificaciones, trafico, rostros infinidad de generalidades se les presentan para ser exploradas, pero también se concentran en las particularidades que se encuentran ahí donde te detienes hacer tus compras. Así que en tanto tú haces tus compras los niños deambulan por todos lados y aprenden. Así de increíble es la mente infantil que aprende por si sola. La experiencia me dice que todo aprendizaje fortuito es increíble en el niño pues aprende al natural, no encuentra obstáculos. Al explorar, indagar, experimentar  y comprobar el niño descubre, comprende y asimila nuevos esquemas de pensamiento, es decir madura.  Lo relevante de estas salidas con los niños al  hacer tus compras es que aprenden por la causalidad, los lleves a donde los lleves, pero también es una realidad cuidar del buen comportamiento de ellos. De establecer límites cuando pierden el control, enseñarles  a respetar las normas de los espacios que visitan es  ahí es donde tu inteligencia emocional cobra un tremendo sentido para permitir fluir su aprendizaje y darles confianza. Para hacerlo se estilan las llamadas de atención  y está bien en tanto estén libres de reactividad y empapadas de asertividad entonces las llamadas de atención cobran sentido para ser atendidas por el niño. El cómo ejecutarlas no te pide serenidad o paciencia, te pide pensar diferente para controlar los múltiples intereses que abres a tu hijo en una salida. Al supervisar a los niños en tanto te encuentras haciendo tus compras o en charlas adultas llega el momento en que pierdes de vista lo que hacen los niños y es natural pues tu tendencia es  monitorear rápidamente y concentrarte en tus compras,  aquí es donde sugiero insertar ese pensar diferente cuando de hacer una llamada de atención a los niños se trata, sobre todo si han perdido el control. Son normales las llamadas de atención para retomar el control y por su seguridad, pero no es normal abusar de ellas, ahí es cuando sugiero acudir a la inteligencia emocional para pensar diferente. Estando el niño contigo, al hacer tus compras, corre el riesgo de ser devaluado, al llamarle la atención por ello hablo de pensar diferente al hacerlo. Lo cual no se adquiere de la noche a la mañana, cada salida con ellos te brindara esa oportunidad para intentarlo. Recuerda que el niño está aprendiendo y el aprendizaje lo vuelve incontrolable, así que la próxima vez que salgas de compras con tu hijo no abuses de las llamadas de atención que devalúan, mejor emplea tácticas para supervisarlo y proteger su autoestima.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por dejarme tus comentarios