jueves, 23 de agosto de 2012

Sueños y fantasías del adolescente

Existe un momento para la fantasía, para los sueños, y es bueno para los adolescentes tener fantasías y sueños en lugar de hacerlos realistas. Si insistes en empujarlos a la realidad, significara que estás destruyendo su juventud y por lo tanto estás haciendo adultos antes de que les corres­ponda.
Los sueños y las fantasías son parte de su crecimiento; desa­parecerán espontáneamente. La misma vida los hará más realistas; antes de que se incorporen a la vida, déjales disfrutar de sus sue­ños porque en la vida sólo hay pesadillas. Se volverán muy realistas pero siempre recordarán esos días de sueños v fantasías como los más bellos.
Esos sueños y esas fantasías no les pueden hacer daño. Forman parte de la vida; por eso la juventud siempre ha fantaseado y so­ñado.
Déjalos soñar y fantasear, no te están haciendo daño. Pronto estarán cargados de obligaciones, trabajos, niños, esposas. Antes de eso tienen poco tiempo; déjales que empleen sus fantasías, no les hace ningún daño.
La experiencia de ese tiem­po de ensueño les ayudará a recordar que la vida puede ser dife­rente: no tiene por qué ser un sufrimiento. No es necesariamente una desdicha.
Han vivido con belleza. Existe la posi­bilidad de tener una transformación consciente en la cual puedes tener experiencias mucho más bellas que en ningún sueño. Pero el sabor de los sueños es bueno; te mantendrá alerta ante el he­cho de que no todo lo que hay es sufrimiento. Existen más posi­bilidades.
La juventud es la época de los sueños y las esperanzas, y cuan­do estás perdido en el así llamado mundo real, esos momentos te harán recordar: «¿Realmente existe alguna forma de encontrar un estado de paz, serenidad, silencio y alegría?»
Por eso, no creo que haya ninguna necesidad de cambiar nada.
                                                                                                                     

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por dejarme tus comentarios